Erase una vez el amor
No siempre fui bueno con ella, mas bien era malo. La amaba tanto y no sabía qué hacer. En vez de darle lo que sentía,de llevarla con ese áspero amor, me lo tragaba. Es algo que todavía no entiendo: su amor me llegaba tan fácil, en cambio el mio no fluía hacia ella. Creo que su amor reprimiaal mío. Ella y su amor formaban una sustancia espesa y mi amor y yo nos quedábamos atascados, entonces me volvía una furia y ella no podía entenderlo. La traté mal muchas vecesporque estaba desesperado pero la quería más que a mi vida y cuando se fue mi vida se apagó.
Cuando supe que nunca más iba a tenerla enloquecí. Antes que pase un segundohabrás muerto cien mil veces dice una frase del corán y yo tuve que vivirlo. No había dejado de amarme pero su amor estaba enfermo y no soportaba mi presencia. Vi todo el doloren sus ojos, todas mis traiciones y mentiras, yo era la persona entre ella y yo, el rival imposible. Entonces, cuando ya no me importaba, estalló mi amor, su amor enfermo nohacía resistencia y el mío fue hacia ella como un rayo pero ella estaba cerraba. Y mi amor se quedó conmigo y hubo gotas de sangre en mi silencio. Ella se alejó y yo entré alcuarto frío, el menos florido de todos los manicomios, y todavía no salgo.
Como no tengo a quién odiar lo odio a él, como no hay culpable, lo culpo a él, como no hay enemigo,le convierto a él en enemigo. Mi amor es sobrenatural, un pecado sin Dios, una telenovela sin fin, un nuevo comercial de margarina. Como a quien debo matar es a mí, mato elamor. Como soy el incendiario, el innombrable, lo nombro a él. Como no he podido explicarle a ella cuánto la amo, se lo explico al mundo.
Efraim Medina Reyes (Pág 108)
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