ES POSIBLE UNA NUEVA ESCUELA… UTOPIA O REALIDAD?



ES POSIBLE UNA NUEVA ESCUELA… UTOPIA O REALIDAD?

Abstrac
En este artículo queremos resignificar la importancia de que todos nos planteamos: la transformación de la escuela como institución social.
En los últimos tiempos, y en el marco de la globalización y de la hegemonía del proyecto neoliberal en el mundo, dos realidades superpuestas y contradictorias han planteado la necesidad decambios profundos en la escuela de hoy y en el rol docente de manera específica.
Una nueva gestión educativa estratégica con actores involucrados en el deseo de cambiar requiere un alto nivel de competencia profesional.







Palabras claves: Desafío - Cambio - liderazgo - Gestión Educativa Estratégica


ES POSIBLE UNA NUEVA ESCUELAS… UTOPIA OREALIDAD?

Múltiples problemas atraviesan los establecimientos educativos. Indudablemente, esto se debe a la repercusión y el impacto de las políticas neoliberales que alcanzaron sin piedad a las instituciones escolares, y más intensamente a aquellas que se encuentran en barrios pobres. Esta situación, sumada a la crisis económica, social y política del 2001, termina afectando las institucioneseducativas, que se ven obligadas a cumplir funciones que nada tienen que ver con su quehacer educativo. Al verse desvirtuado el fin con el que la escuela fue pensada y creada, se experimenta un sin- sentido en todos los actores escolares.
¿Con qué objetivos fue creada la institución escolar?
¿Qué elementos le dieron significado?
Según Frigerio, cada institución se construye a partir de unprimer contrato o contrato fundacional, que le asigna un sentido. La institución escuela es portadora de un mandato social. Este contrato fundacional se establece entre la sociedad y la escuela. La responsabilidad de la escuela es movilizar recursos para poder cumplirlo, es decir, organizar los procesos de distribución de saberes con un currriculum prescripto. Mientras que el Estado es elencargado de verificar el cumplimiento de dicho mandato, es decir, es su garante.
Hoy en día, el sistema educativo expresa una ruptura contractual, por parte de la sociedad y también de la escuela: hay un mutuo incumplimiento del contrato fundacional.
Lidia Fernández, piensa que la escuela nace como una organización especializada, portadora de un mandato genérico, que es el de asegurar la continuidadsocial a través de la transmisión de la cultura. A la vez, se espera de ella que produzca un avance hacia alguna forma social utópica, lo cual transforma a este mandato social en un doble mandato, muchas veces paradojal.
El mandato se expresa a través de fines y objetivos que le otorgaron significado a la escuela. Estos significados se definen como la socialización mediante la enseñanza deconocimientos socialmente válidos.
Las escuelas argentinas se fundaron respondiendo a un mandato que instaló una contradicción en su génesis, la de la construcción de la nacionalidad y el estado mediante la negación de la cultura nativa y la de aquellos inmigrantes a través de los cuales se intentó resolver el contraste entre la civilización y la barbarie. Es decir, un mandato igualador y un mandatoexclusor.
En los últimos tiempos, y en el marco de la globalización y de la hegemonía del proyecto neoliberal en el mundo, dos realidades superpuestas y contradictorias han planteado la necesidad de cambios profundos en la institución escolar y en el rol docente de manera específica.
El desarrollo y la expansión de las nuevas tecnologías, el desarrollo de la pobreza y la exclusión social hanobligado a las instituciones escolares a asumir otras funciones.
En la actualidad, la escuela como instituciones, tendrían que redefinir su misión y construir una nueva visión, simultáneamente romper estructuras que solo servían para una sociedad poco cambiante para sustituirlas por formas organizativas más flexible para este entorno variable. (Modulo 1 Desafíos de la educación)
Hasta acá...