Escribir sin prejuicios
N I S U P E R S T I C I O N E S
Cassany Daniel.
Describir el escribir. Barcelona. 1998
Cierto día una amiga me confesó que se sentía muy consternada porque hacía bastante
tiempo que se dedicaba intensamente a redactar su tesina y sólo conseguía escribir una hoja cada
día ( después de haber llenado montones de papeles); pensaba que no sabía escribirporque se
daba cuenta de que algunos compañeros suyos podían redactar textos con mucha rapidez, como si
fueran churros. Del mismo modo, muchas veces ha conocido muchos alumnos adultos que
idolatraban la ortografía creyendo que saber escribir consistía básicamente en conocer y recordar
las reglas de gramática, y se angustiaban extremadamente si descubrían alguna incorrección en sus
escritos; oincluso otros que, cuando escribían, se limitaban a transcribir el flujo de su pensamiento,
siendo incapaces de elaborar las ideas (para éstos reescribir un texto era una operación costosísima
y una pérdida de tiempo). Desgraciadamente, la práctica de la escritura está llena de prejuicios y de
supersticiones como éstas. Puede tratarse de vicios adquiridos con el tiempo o de costumbresancestrales que obstaculizan el proceso normal de producción de texto escrito; o también juicios
erróneos establecidos por la enseñanza oficial, que bloquean a los autores y mutilan los textos. Pero
demasiadas veces, ideas y prácticas son sólo producto de la ignorancia y sea cual fuere su origen,
no hacen ningún favor a sus dueños, los escritores, porque les privan de poder escribir con plenitud.
Enlo que se refiere al código escrito, el perjuicio más importante que sufrimos es el de la
sobrevaloración de la gramática de los textos por encima de otros factores como la coherencia, la
adecuación o el desarrollo de las ideas. Esto provoca que estas propiedades se desatiendan,
corriendo el riesgo de promover y difundir textos impecables de gramática pero pobres de
significado. Nadie pone enduda que la ortografía y la gramática son importantes y tienen una
función propia en la expresión escrita, pero no hay que olvidar que sólo son un componente, el más
superficial, de todos los conocimientos que conforman el código escrito.
En cuanto al proceso de composición, una de las supersticiones que todavía perdura es la
idea de la inspiración. No creo que nadie crea que la calidad de lostextos que redacta dependa de
Dios, pero hay muchos escritos que, cuando intentan repetidamente escribir un texto, no lo
consiguen, y por las dificultades que tienen abandonan el intento, dicen que no están inspirados. No
se trata sólo de una manera de hablar. Se refieren a que no tienen ideas sólo porque no se les
ocurren, o que no encuentran las palabras exactas para expresarlas. Dan aentender que el
ambiente del momento no es el propicio. Quizá tienen la cabeza cargada o están cansados y hace
falta esperar aquel instante mágico en el que las ideas y las palabras brotan de forma natural y
espontánea. El hecho de que surjan o no surjan las ideas no depende de nosotros porque no
podemos controlar de ninguna manera este instante misterioso de inspiración.
Contrariamente sabemosque las ideas y las palabras de un texto proceden de nuestra
memoria, que registra lo que escuchamos y leemos, o de los libros y materiales de consulta con que
hemos trabajado. También sabemos que no acostumbramos a reproducirlas de forma exacta a como
las comprendimos o las recordamos. Durante la composición las reelaboramos utilizando procesos
intelectuales como la generación de ideas, laorganización, la planificación o la revisión. Mediante
estos procesos podemos incluso crear ideas nuevas: podemos desarrollar conceptos nuevos a partir
de viejas ideas, refundir y ampliar informaciones, compararlas, etc.
Por lo tanto el autor es el único responsable de los textos que produce y no hace falta que
espere ningún tipo de inspiración para encontrar las ideas o las palabras para...
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