Escrito amigo

Me levanto con dolor de cabeza; después de una fiesta, fiesta en la 23 con cuarta. Me sirvo un café negro, cargado, y me planto en el ventanal que queda frente a la vista capitalina, lugar de mil pecados, pecados que elegantemente entran por mis arterias. Levanto la ceja al tiempo del sorbo agrio del café. Suena el teléfono, me pregunto quien será, no me importa, dejo que suene más de cincoveces, dejé así, me dirigí a contestar pero ya era demasiado tarde, ya no volvió a sonar. Me quito el Bóxer y camino descalzo por el piso frio del baño con cara de desgraciado y embutido del alcohol, el agua fría y fulminante me hace gemir. Meto la pierna derecha y después la izquierda. Empiezo a jugar infantilmente con el agua como si fuera una pelea territorial. Ya al final meto mi flácido cuerpo.En el trayectoria del agua recuerdo esa noche de rumba descarada. Cojo ese jabón frio y burbujeante y acaricio mi cuerpito molido de tanto paso fino en la salsa brava de Paco Luis y el viejo Héctor Lavoe…mi cuerpo echo espuma relajante y toco cubierto hasta las pelotas, cuando suena el teléfono. ¡Ahora quien putas será!, grite, y con toalla incrustada en mi cuerpo enjabonado corro en puntas paracontestar. Era la voz de prepago de mi amiga Susana Páez, diciéndome que fue una locura la farra. Yo respondí con dos piedras en la mano y le dije que tenía frio y me estaba bañando. Colgué y corrí como demente de nuevo al baño. Termine de bañarme con la toalla camine a la cocina a calentarme un tintico rico y negrito. Y voy cogiendo el tinto a la pieza a cambiarme; planche la camisa y el pantalóny busco mi billetera. Teniendo la maleta puesta y llaves en mano salgo hacia el sur, el sol me da el primer puño al rostro. Radiante y enérgico. Pero antes de eso veo entrar a la mamasota de la chica del 405. –Hola—salude sin respuesta. Llegue a la avenida principal a esperar ese cebollero bus que me deja en la Universidad. Entro, saludo a Raimundo y todo el mundo. Y comienza la charla simplistade Susana. Creo que no puede pasar mas que una simple fiesta, parece que perdió la virginidad, murmuro mi amigo Federico Garzón, ¡Huy Pana! Como dices eso, amigo quien se la pasa hablando de eso cada rato. Bueno si tienes razón compadre, respondí con risa forzosa. Suena ese timbre a clases y mi oídos se iban a reventar. Termina el calvario de los libros de Kant y de Descartes (Primero pienso ydespués existo) salgo a la cafetería y estaba Mónica una chica de 4 semestre de Filosofía, yo estoy en 3 semestre, me quede mirándola como un niño imaginando no se que cuantas cosas con ella. Ella se asusta al verme y corre pero me mira con picardía. Eso creo yo, trato de hablarle y decirle que quiero saber de su mundo. Demasiado tarde, tiene novio. ¡Mierda! Me arriesgo y le hablo. —Hola ¿Cómo estas?—Bien y ¿Tú quien eres? No pues me llamo Andrés, voy en tercero —Ahhh…interesante —Gracias. —Y ¿Qué quieres de mí? —No, pues, conocerte y invitarte un café —Hmmm….rico, pero no puedo. —¿Por qué? —Mi novio es celoso, y sinceramente prefiero evitar problemas. Lo siento Andrés ¿Si te llamas así? —Si me llamo Andrés. Tranquila. No hay problema —Hay gracias hasta pronto, pero toma este es mi correomoni_kfb@hotmail.com —Okey gracias y hablamos por ahí —Cuídate. —Lo mismo Valiente, pero con orinada incluida tome ese papel. Me fui a fumarme un cigarrillo y a respirar un poco de aire contaminado. Saco el libro de Kant para no aburrirme y suspiro en mis lecturas, el cielo se opaca en gris. Y las góticas comienzan a bañarme el pelo. Salvo el libro entre mi morral— ¡Te vas a mojar! — Grito Susana.Relájate estaré bien, mejor me voy a la 23…— ¡Noooooooooo! — Grito, ¿Por qué? — ¿No supiste que hubo un incendio en la 23? — No, ¿Cómo así que fuego en la 23? — Grite y Salí corriendo como alma que lleva los demonios. Corro y corro y corro pero veo que eso esta lejos. Llego y el bar de anoche estaba en llamas de 2metros. No lo puedo creer, después de una noche llena de fuego pasional, ahora se...