Escrito de mi madre
A veces añoramos una vida que dejamos atrás pero que nos rompió el alma!Cuántas torpezas hemos llorado y cuanto nos cuestadejarlas ir!!
Nos aferramos a ellas como si no tuviéramos fe en que Dios nos tiene algo mejor más adelante en nuestra vida.
Y cerramos los ojos del corazón para callarlo empeñándonos en sufrircuando nuestra razón para estar aquí es aprender lo que es la verdadera felicidad.
Nadie, absolutamente tiene la facultad de hacerte feliz o no.
Puedes llorar por una persona que amas y aunser feliz.
Si Jesús desgarró su cuerpo con amor y por amor haciéndose inmortal e inolvidable ¿cómo no aceptar el dolor?
Hay que ser valiente y amarrarse el corazón abriendo bien los ojos paraver entre lo que creemos que es tiniebla.
Nunca debemos olvidar que cuando creemos que tambaleamos y que no podemos seguir, Jesús nos tiene entre sus brazos y que El nunca permite que caminemosdonde su Gracia no nos alcanza si tan solo tenemos la fe del tamaño de un granito de mostaza.
Aprendamos a convivir con Dios, nuestro Padre bueno, que nos llevará hasta la felicidad eterna siaprendes a aceptar la vida y a echarle ganas para salir siempre al claro de la montaña y respirar abriendo los brazos y mirando al cielo hasta caer de rodillas para demostrar la grandeza de tualma.
Con ese furor que quema el pecho cuando el amor es quien te mueve.
Padre a tus pies caigo atreviéndome a tocar el borde de tus vestiduras con la fe puesta en que me mostraras el camino quetienes trazado para mí!
A veces soy torpe y no entiendo que me dices, pero sabes mejor que yo, que no quiero caminar por otros caminos, así que guárdame en mis delirios aunque la vida me hagallorar cuando no la entienda.
Ana Milagros
01-01-14
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