Escritora
Si bien, muchos tenemos nuestros propios ideales, reflexiones y/o pensamientos sobre lo que cargamos como por vida,somos como las matemáticas con triángulos incongruentes, no llegamos a realizar más allá del pensamiento, solemos seguir a ésta manada llamada “sociedad”, haciendo que nuestras visiones, sean totalmenteopacadas por ésta errónea idea de encajar en ella.
Sin embargo, no quiero sonar amargada, ni un tanto disgustada por como es nuestra vida como ciudadanos, pues todos escogemos ser como queramos yacudir a lo que nos sea necesario para vivir. No digo que esté mal, pero, ¿es necesario dejar de lado nuestro propio ser? Hemos ignorado nuestros ideales como personas, callar nuestro lenguaje articulado,donde podrían llover centenares de ideales, o cambios que se podrían hacer para vivir mejor. No obstante, preferimos mantener silencio, ser sigilosos como el viento y continuar el rumbo sin articularsiquiera una palabra, aun sí no pensamos de la misma manera de los que nos rodean.
Ahora, me pregunto, ¿qué somos realmente?, ¿qué es lo que realmente amamos de por sí? Si para ser francos, todolo que decimos amar, lo ocultamos o nos protegemos de ellos como si fuesen misiles contra nuestro cuerpo sin armadura. Incluso en ciertas ocasiones me resulta un tanto desconcertante cuando a mis 16años de edad, alguien pueda pronunciar con tanta seguridad en sí mismos que están enamorados de una. Puesto que, he oído en reiteradas veces que aman la lluvia, sin embargo, ¿por qué se protegen de ésta?Si tan abiertamente dicen amar una cosa, no existe peor inconsecuencia que mostrar lo contrario y es que después nuestras propias palabras se vuelven de poca credibilidad para el resto, si...
Regístrate para leer el documento completo.