espíritu, persona y sociedad

 18 diciembre 2009

Espíritu, persona y sociedad: George H. Mead.

La persona y el organismo.

El proceso del lenguaje es esencial para el desarrollo de la persona, ésta posee un carácterdistinto del organismo fisiológico. Y es algo que tiene desarrollo pero no está presente en el nacimiento si no que surge en el proceso de experiencia y de las actividades sociales. En nuestras acciones habituales (nuestras idas y venidas por un mundo que existe simplemente) existe cierta proporción de experiencia sensorial como un simple “estar allí” como por ejemplo cuando las personas se acabande despertar. Los caracteres que nos rodean pueden existir en la experiencia sin ocupar su lugar en relación con la persona y aquí uno debe distinguir entre la experiencia que tiene lugar inmediatamente y nuestra propia organización de la misma en la experiencia de la persona. Organizamos nuestros recuerdos y las fechamos desde el punto de vista de nuestras experiencias pasadas aunque en algunosno podemos realizar esta acción y por ello podemos sentirnos insatisfechos porque no podemos ubicar esa imagen de un recuerdo.

Podemos distinguir entre la persona y el cuerpo. Éste último puede existir y operar inteligentemente. La persona se caracteriza por ser un objeto para sí haciendo que se distinga entre otros objetos y el cuerpo. No podemos obtener una experiencia de todo nuestrocuerpo, por ejemplo, el ojo ve el pie pero no ve el cuerpo como un todo; no ve la espalda pero si podemos palparla. También existen experiencias vagas pero las corporales están organizadas en torno a nuestra persona. Podemos perder partes del cuerpo sin sufrir una seria de invasión de la persona. El cuerpo no se experimenta a sí mismo como un todo ya que la persona entra en la experiencia de lapersona. La característica nombrada anteriormente está representada por el término “sí mismo” indicando lo que puede ser al propio tiempo sujeto y objeto. Éste objeto ha sido distinguido en el pasado como consciente indicando una experiencia con la propia persona. La conciencia poseía esa capacidad de ser un objeto para sí misma.

Cuando uno corre porque se le persigue está ocupado en esa acción ysu experiencia puede desaparecer en los objetos que le rodean y no tiene ninguna conciencia de sí mismo. Están también las imágenes que atraviesan el espíritu de la persona que se encuentra ahogándose. Existe un contraste entre una experiencia envuelta en una actividad exterior y una actividad de la memoria y la imaginación. Con todo esto la persona es distinguible de un organismo rodeado por cosasy actuando con referencia a cosas.

¿Cómo puede un individuo salir fuera de sí de modo de poder convertirse en un objeto para sí? La solución a esta pregunta se encontrará recurriendo al proceso de la conducta social. El aparato de la razón no sería completo a menos a que el individuo se ubicase en el mismo campo experiencial de las otras personas individuales con las que actúa en situacionessociales. La razón no puede tornarse impersonal a menos de que adopte una actitud objetiva, de lo contrario tendremos sólo la conciencia no la conciencia en sí.

El individuo se experimenta a sí mismo como tal desde los puntos de vista particulares de los otros miembros individuales del mismo grupo social o desde el punto de vista generalizado del grupo social. Entra en su propia experienciacomo persona o individuo sólo en la medida en que se convierte en objeto para sí del mismo modo que otros individuos son objetos para él o en su experiencia y se convierte en objeto para si sólo cuando adopta las actitudes de los otros individuos hacía él dentro de un medio social o contexto de experiencia y conducta.

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