ESPAÑOL

¿En cuántas ocasiones nos hemos sentido perturbados al observar a un anciano que a pesar de sus limitaciones físicas, propias de la edad, continúa en la lucha diaria y sin el apoyo de sufamilia? Para muchos de nosotros esto no debería pasar, pero lamentablemente, sucede y mucho.
Muchos adultos mayores no son muy afortunados. Algunos tienen parientes de quienes cada vez sabenmenos, y algunos otros, se encuentran en total abandono por parte de sus familiares. Es sumamente conmovedor cuando en su mirada se puede apreciar una melancolía infinita y es ahí cuando nospreguntamos: ¿Dónde están esos hijos que por años recibieron amor y cuidado de sus padres?, ¿Dónde esos nietos que alguna vez, siendo niños, se fascinaron con las historias que les relataban susabuelos?
El día 28 de agosto celebramos el “Día del Adulto Mayor” y una gran forma de festejarlo sería reflexionar sobre lo que significa ser un adulto mayor en nuestra sociedad y nuestrocomportamiento ante esa situación: ¿Qué hacemos para ayudar a los adultos mayores?, ¿Qué estamos haciendo ahora para construir un futuro más digno para los nuestros y para nosotros mismos?,¿Podemos decir orgullosamente que estamos al pendiente de nuestros queridos adultos mayores y que jamás serán excluidos de nuestra vida?
Estoy segura que ninguno de nosotros quisiéramos vernos enel futuro en una situación de abandono. Valdría la pena reflexionar todo lo anterior porque nosotros mismos, tarde o temprano, tendremos la misma edad y seguro que todos esperamos ser tratadoscon amor, respeto y cuidados.
Esto es una celebración de un día, pero la introspección y las acciones son semillas que se riegan a diario.
¡Felicidades a todos aquellos mayores de 60 años,que tengan un gran día! Y felicidades también a todas esas personas que se preocupan por ellos, que los atienden y que les devuelven un poco de todo el amor que alguna vez les dieron