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EL SENTIDO DE COMUNIDAD COMO UNA META DE LAS INTERVENCIONES COMUNITARIAS
“Sólo llego a ser yo mismo cuando los demás llegan a ser ellos mismos.”
Paulo Freire (1969)


Cuauhtémoc Chávez Zavaleta1
Octubre de 2012
Nos parece que hablar del sentido de comunidad requiere primero de la revisión de la noción de comunidad. De manera un tanto arbitraria, podemos señalar su aparición en la escenade las ciencias sociales, desde que Fedinand Tönies distinguiera Gemeinshaft (comunidad) de Gesellshaft (sociedad como asociación)2. Al menos desde ese momento ya tenemos la certeza de que la comunidad se ha entendido básicamente como una forma de agrupación producida por la acción de sus integrantes, con continuidad en el tiempo, ubicación espacial específica, con grupos y personas ligados porcaracterísticas comunes, tales como valores, creencias, ideas, intereses y aspiraciones, con tradiciones sostenidas a través de varias generaciones, y con formas localmente peculiares de organización en las que prevalece la cooperación (Nisbet, 1966 y Coleman, 1966, en Hombrados, 2011).
A pesar de que varios de los elementos adjudicados a la noción de comunidad continúan siendo reivindicados, nopuede ignorarse la considerable complejidad que implica el intento por delimitarla conceptualmente. Por ejemplo, la anterior descripción resulta tan general, que es fácil pensar en la comunidad rural como su prototipo; sin embargo, creer que las comunidades deben ajustarse a este patrón para ser valoradas, sólo representa una postura “romántica” (idealizada, prejuiciada), cargada de nostalgia,pues esa forma de su existencia casi ha dejado de estar presente en la vida social actual, y en cambio sus tipos se han diversificado cualitativamente y en algunos casos, drásticamente, como en el caso de las comunidades virtuales.
Al tratar con las actuales comunidades urbanas, lo primero inédito que encontraremos es su gran tamaño, complejidad, heterogeneidad, que supone múltiples y diversoscontactos, generalmente inestables, superficiales o hasta los que imposibilitan la noción del “nosotros”. Según Senett (1975, en Hombrados, 2011: 100), en este tipo de comunidades las interacciones sociales generan tensiones, pues generalmente implica una segregación espacial y entonces aparece “la necesidad de un ajuste mutuo por pura supervivencia”; es cuando se habla de “comunidades desupervivencia”. La solidaridad típica de la comunidad rural, puede entonces tornarse en mera competencia y en controles sociales institucionalizados, ya no comunitarios u orgánicos.
Es decir, las comunidades pueden tener o no una base geográfica, y por lo pronto en las ciudades es posible hacer una diferencia entre comunidad y barrio (Hombrados, 2011). El barrio ocupa la forma geográfica del espacio y en varioscasos se vuelve la unidad de análisis; en tanto que la comunidad se entiende mejor a partir de las interacciones sociales y simbólicas. Pero el barrio no es solo lugar, sino que integra a las personas que lo habitan, y por lo tanto su tejido social y un uso compartido de los recursos locales, así como su eventual dimensión simbólica y emocional. En algunos casos ambas nociones coinciden y elbarrio o parte de él se puede tornar en comunidad, lo cual se parece a lo que se conoce como ‘barrio tradicional’; en otros, los barrios son inestables y las personas no se hayan conectadas a éste, por lo que no se sienten responsables por él y ejercen poco control sobre su espacio y las normas sociales informales, imperando el anonimato y la impersonalidad. Estos últimos parecen ser los barrioscomunes en nuestras grandes ciudades, y son los que justifican la actuación de psicólogos sociales al intentar catalizar la construcción de comunidades.
Por ende son necesarias otras propuestas para reubicar la noción de comunidad en nuevas formas de agrupamientos, que no obstante contienen elementos que están proporcionando sentido de pertenencia, facilitando la formación de identidades a partir...