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El otro error de gestión en el Plan Estadio Seguro es su eficacia… Los verdaderos objetos de la ley eran las barras bravas, pero vemos cada fin de semana que las drogas, lasbombas de ruido, las bengalas, los fuegos de artificio y otros elementos prohibidos esquivan en masa los anillos policiales. Son estos hechos los que nos hacen creer que la ley esimpracticable en nuestra sociedad y que por tanto es esta conciencia la que hace saber a las barras que son dueñas de los estadios aún….

A nuestro entender es aquí donde entra en juego unsegundo factor ante la desobediencia civil: la responsabilidad gubernamental. Es este punto el que debería contrarrestar los efectos de un quebrantamiento del contrato social que nos hemospropuesto. La desobediencia no se fundamenta en el afán de los individuos por quebrantar las reglas o cómo diría Hobbes en el principio de que “Homo homini lupus est” (el hombre es unlobo para el hombre) sino en una falta de ‘tino’ de las autoridades en la confección de normas acordes a una forma de vida y en este caso es claro que no somos una sociedad europea encuanto a cómo se vivencia el fútbol.

Thomas Hobbes señala además que fomentar la sana convivencia es la única forma del hombre de evitar estos comportamientos, pero a nuestro modo dever el conflicto, la falta clara de esta ‘sana convivencia’ en los estadios no ha sido responsabilidad en sus orígenes de las hinchadas, si no de una forma de hacer las cosas hacemuchísimos años y que sólo ve su clímax en respuestas inútiles de la autoridad como lo es el Plan Estadio Seguro.

En conclusión, el conflicto de los estadios sólo puede resolverse aunandovoluntades políticas en pos de una normativa que responda a las necesidades del fútbol chileno. En razón de esto y con la generación de espacios para las familias, junto con la des