Estrellas

Las estrellas son hermosas. Son brillantes, lejanas, valiosas, inalcanzables.
Admirar un cielo estrellado, es un espectáculo al que me limito a contemplar, solo ciertas noches de mi vida, porpequeños momentos. Salir de mi mundo por algunos instantes, caminar tambaleándome suavemente hasta el patio trasero y sentir sobre mi cara aniñada la fría brisa nocturna. Titiritando de frio lascontemplo y siento como si el mundo entero desapareciera para mí. No hay nadie más que solo ellas y yo. Ellas mirándome y yo mirándolas a ellas. Siento como si, el universo quisiera mostrarme su inmensidady con ello hacerme sentir súbitamente insignificante.
Y la realidad me golpea de frente. Me dice: “No eres nada. No eres nadie. Mírame y contempla lo que es la Inmensidad”
Y entonces, comienzo apreguntarme sí las pequeñas hormigas que caminan sobre la acera de mi hogar, se sienten de la misma manera, cuando alguien tan grande como yo, camino a su lado y sin querer me burlo de su pequeñez. Mepregunto, sí sentirán el mismo miedo que yo siento cuando contemplo al cielo nocturno, abarrotado de estrellas, cubriéndome, pisoteándome y dejándome desnuda ante él. Y me pregunto sí Dios es esainmensidad.
Esa puerta que se abre y se precipita hacia el infinito para siempre. ¿Eso es Dios? No un libro. No palabras. No actos de bondad. No castigos. Si no, ESA inmensidad.
Siento frio. Tiemblo.No se sí es por el crudo invierno que me golpea en medio de la noche o por miedo. Dios. El universo. Ellos me dan miedo.
Intento cobijarme, aferrarme al pedazo de tela que inútilmente me cubre.Intento mantener una temperatura cálida, pero el frio sigue allí. Pienso de pronto que debería guardar las reflexiones para otra ocasión o podría terminar resfriada.
Doy una última mirada al cieloestrellado. ¡Ah que hermosa vista!
¡Tan omnipotente! Que antes de despedirme y darle la espalda al Universo, tiemblo por última vez y me marcho.
Quizás es demasiado pronto para reflexionar sobre el...