estructura

Una nueva teoría


Aula de Física, con dos puertas. Por la puerta derecha entran los alumnos. Por la puerta del fondo, los profesores.

carlos.- (Limpiando la mesa del profesor). Ya llegó, como siempre, a las 7 en punto. (Entraalejandro).

ALEJANDRO.- ¿Qué, ya vas a llamar?

CARLOS.- Pues como siempre, este hombre llega temprano. (Imitando al profesor.) "carlos, vamos, llame usted aFísica”. ¿Y tú qué haces? Esperando al Director seguramente.

ALEJANDRO.- Yo puedo hacerlo, porque siempre estoy perfecto… no estoy loco. Tú, en cambio, siempre llevas encima cervezas. (Sacándole una botella del bolsillo.)
CARLOS.- (Quitándosela). Mira éste... vete... no comencemos. Está visto que somos imbéciles.

ALEJANDRO.- Oye tú, no hables en plural habla en singular.

CARLOS.-Bueno, pues eres un imbécil.

ALEJANDRO.- No perjudica el que quiere, sino el que puede.
CARLOS.- Como se conoce, por lo bien que manejas el lenguaje se ve que el director ya te pego su lenguaje.

ALEJANDRO.- Cultura, Carlos, cultura que se me he pegado y que me es muy difícil separar de mí. Luego continuaremos dialogando. (Marchando).

CARLOS.- Adiós, pues. (Sale Alejandro).CARLOS.- (Dirigiéndose a la puerta derecha). Física. (En voz alta). (Los alumnos entran en clase y se sientan. Aparece inmediatamente D. Elias, que se dirige a su mesa. Los alumnos, al verle entrar, se ponen de pie. D. Elias ocupa su asiento y les hace un gesto para que se sienten) (Sale Carlos).



DON ELIAS.- Vamos a tratar hoy, como último día de clase, recordar algo de lo ya explicadoanteriormente. Decíamos ayer, que son numerosas las causas que producen energia. Vamos a ver, señor fernando, diga algunas causas importantes.

FERNANDO.- (Poniéndose de pie). El estado de la atmósfera, las condiciones de los mares, montañas... la hora del día, la época del año...
DON ELIAS.- ¿No sabe usted más que eso? Ayer dije muchas cosas mas, por cierto, con mucha exactitud científica ¿Pudieradecirnos algo sobre esto la señorita... de la última mesa?. Siéntese, señor fernando. (Se sienta fernando).

ADRIANA.- (Se pone de pie.) Creo que sí, señor. Dependen de la constante, delmagnétismode la atmósfera, y sobre todo su fuerza en las capas
D. ELIAS.- Muy bien, señorita; usted ya sabe que el fenómeno, es algo mucho más compleja que lo que algunos pretenden. Puede usted sentarseseñorita. (adriana es sienta) Pasemos ahora a la luz. ¿Qué nos dice el señor eddison sobre "esencia de la luz”?.

EDDISON.- (Poniéndose de pie) De eso recuerdo que usted nos habló de diversas teorías, defendidas por grandes hombres y por tan poderosa razón yo no me atrevo a... discutirlas.

D. ELIAS.- pero , usted habrá leído en diferentes autores algunos comentarios.

EDDISON.- Sí señor, perotampoco están de acuerdo, y por eso... yo tampoco...
D. ELIAS.- Sí..., sí..., ya comprendo; usted no se atreve a opinar. Pero durante todo el curso no opinó usted, y da a entender que no sabe nada de nada.

EDDISON.- Mire usted, don Elias, en eso..., créame, en eso están conformes todos los autores.

D. ELIAS.- Pues mañana, a las cuatro de la tarde, sufrirán ustedes la prueba de conocimiento ydos días despues se reunirá la Junta de Profesores para calificar. Ya veremos cuántos de ustedes terminan este curso; pero continuemos. Siéntese usted. ¿Pudiera la señorita de ...?.

ADRIANA.- (Levantándose) De la última mesa, ¿verdad, don Elias?

D. ELIAS.- Eso... sí... sí... de la última mesa. ¿Se ofende usted por ello?.

ADRIANA.- No señor, es que como todo el curso no he sido para ustedmás que eso... (Fernando, que durante toda le clase, está mirando a adriana y a don elias, hace un gesto).

D. ELIAS.- ¿Y qué más podía ser?.

ADRIANA.- (Sonriendo) Un nombre y dos apellidos.

D. ELIAS.- (Riendo) ¡Ah! sí, efectivamente, perdóneme, ¿cómo es su nombre?.

ADRIANA.- Me llamo Adriana.

D. ELIAS.- Adriana y algo más.

ADRIANA.- Adriana Cortés Noriega.
D. ELIAS.- Pues...