Estructural
Si bien podemos decir que el garante del orden constitucional es el ejército no podemos decir que por la misma validación que le da esta institución a la nación esta sea considerada independiente de la institución política del estado. En una nación afectada por una violencia intermitente desde 1946, en donde el orden publico lo ha tenido un papel abrumadoren la vida contemporánea del país, esta omisión fue de enormes proporciones y de consecuencias muy negativas: en efecto, condujo a un aislamiento pronunciado de las fuerzas armadas, a un grave “autismo institucional”. Sin embargo, no deja de estar solicita a los intereses de los capitalistas terratenientes del país, y no deja de estar solicitó a los interés políticos de la burocracia colombiana.Tres factores condujeron a este aislamiento relativo de las fuerzas armadas en el manejo del orden publico interno. E primer termino, hay que mencionar que la larga tradición de entregar la responsabilidad política en los asuntos de defensa y en manejo del orden publico a los miembros de las fuerzas armadas. En segundo termino, los canales de responsabilidad política en la conducción de lasfuerzas armadas era en extremo difusos o simplemente inexistentes. En efecto, un rápido análisis del esquema organizacional del sistema de defensa y de los organismos que lo componían mostraba que no existían mecanismos de control político claro y consistente. Finalmente, en Colombia se presentaba una ausencia total de discusión entre civiles y militares, tanto de los aspectos conceptuales comooperativos de seguridad.
La confrontación política y su mas cotidiana expresión, las guerras civiles, continuaron torpedeando el objetivo a un punto tal que, mientras la policía se debatía en su disolución a comienzos del siglo pasado, el ejercito no era mas que un cuero amorfo, politizado y diseminado en numerosas divisiones a lo largo y ancho del territorio nacional, sin centralización efectiva, sincoherencia disciplinaria, sin formación táctica y sin grado de profesionalidad alguno. Por lo que podemos evidenciar la fuerte dependencia de la institución militar ante la institución político-económica, ya que sin las directrices del estado mayor, las fuerzas armadas no tendrían mayor relevancia, por otro lado hay que señalar que en la constitución política de Colombia de 1991, el supremo jefede las fuerzas militares es el presidente de la republica, quien preside la institución política de la nación.
Por su parte, el ejercito mas por razones asociadas a su precariedad institucional, a su débil presencia nacional, a la falta de equipo y de medios de comunicación y aun cierto grado de profesionalismo elevado con conciencia sobre la función constitucional, permaneció neutral frente a losconflictos de violencia interpartidista. Ya que los capitalistas y terratenientes estaban tanto en un partido como en el otro.
El conflicto colombo-peruano se constituyo en una concreta experiencia militar de defensa de la soberanía nacional por la que los militares no habían pasado ni volverán a pasar. Con el conflicto internacional el presupuesto paso de 3.71 millones en 1932 a 16.77 en 1993para alcanzar la cifra tope de 23.69 millones en 1934. Según el general Álvaro valencia tobar, el conflicto con el Perú hizo del ejercito un instrumento militar de primer orden, revaluado espiritual y militarmente. Lo que manifiesta que sin el poder económico y político el poder militar es prácticamente nulo en asuntos de defensa de la soberanía o cualesquier otro menester.
Pasado el impacto...
Regístrate para leer el documento completo.