Estudiante
Presidenciales de América Latina a caminar por la delgada línea que hay entre profesar que seguirán el ejemplo de Chávez, para evitar alienar a sus bases, y que no estorbarán a Washington. A Estados Unidos le gustaría aislar a Chávez, al presidente cubano Fidel Castro, a los manifestantes de Bolivia y a cualquier otro que desafíe el statu quo; pero no terminan de darse cuenta que mientrasla Revolución Bolivarianas profundiza, es cada vez más improbable que los pueblos de América Latina tolérenlas promesas electorales incumplidas. En el contexto de los logros del modelo bolivariano, las protestas y el descontento probablemente aumenten; hasta que loslíderes electos demuestren que son merecedores de la retórica democrática que defienden, y que produce resultados concretos y cambiosprofundos. Parte fundamental del curso degenerativo y destructivo del capitalismo mundial es la catástrofe económico-social de la periferia, donde vive el 85% dela humanidad. América Latina comparte este desastre. Para mejor exportar su crisis, el imperialismo quiere profundizar el sometimiento semi colonial de los países latino americanos. Ya no le basta que el FMI, las multinacionales y lasembajadas de los países imperialistas, en especial de EEUU, actúen como otros tantos súper poderes. Ahora, con elALCA, EEUU pretende dar un salto cualitativo en la colonización. En esa situación,el combate antiimperialista (como la defensa del gas por el heroico pueblo boliviano) asume una importancia fundamental. El no pago de las deudas externas, la ruptura con el FMI, el rechazo al ALCA, laexpropiación de multinacionales y bancos, la oposición al Plan Colombia y a la presencia militar de EEUU son otros tantospuntos de lucha. Al mismo tiempo, con la misma claridad, decimos que para libraruna lucha consecuente contra el imperialismo y que vaya hasta el final, no podemos depositar la menor confianza en los movimientos nacionalistas burgueses o pequeñoburgueses.La experiencia latinoamericana ymundial de un siglo de estos movimientos nos dice que tarde o temprano todos terminaron capitulando, y volviéndose contra los trabajadores que los apoyaron. La presión colonizadora del imperialismo, por un lado,y de la resistencia de las masas, por el otro, ha generado en Venezuela una reedición de los movimientos nacionalistas que en el siglo XX dominaron la escena demuchos países del TercerMundo.Pero Chávez y su revolución bolivariana´ son una pálida imitación, que no ha llegado a tomar medidas radicales como las de Cárdenas en México, Perón en Argentina, Nasser en Egipto o Velasco Alvarado en Perú. Sin embargo, tanto EEUU como la burguesía vende patria de Venezuela desean sacárselo de encima. En esa situación estamos incondicionalmente junto a las masas obreras populares de Venezuelacontra los intentos golpistas de la burguesía y el imperialismo, y por la unidad de acción para derrotarlos. Pero, a la vez, planteamos no depositar la menor confianza en Chávez y a organizarseen forma totalmente independiente del chavismo´.NIVELES DE PARTICIPACIÓN POLÍTICAEn América Latina, las nuevas formas de participación popular que han surgido últimamente permitieron realmente democratizar alEstado? Podemos definir una nueva forma de participación política como un nuevo modo de relacionar el Estado con sus ciudadanos. Definimos un movimiento social como una forma de acción colectiva que buscadesafiar a las élites por medio de movilizaciones masivas con un impacto significativo sobre la esfera política. En las últimas décadas, muchos Estados latinoamericanos se han visto obligados aredefinir su forma de regular a la sociedad y su manera de intervenir en el mercado y en la economía.El Estado ha tenido que adaptarse a un contexto internacional cada vez más dominado por actores privados y particularmente por actores económicos transnacionales. En ese contexto global de pérdida de legitimidad del Estado, su estrategia ha sidode tratar de inyectar cada vez más participación...
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