estética en el romanticismo

TEMA 8. ILUSTRACIÓN Y ROMANTICISMO. EL DERROCAMIENTO DE LA “GRAN TEORÍA”.

ILUSTRACIÓN
Hasta finales del siglo XVIII, la gran teoría de la belleza y la doctrina clasicista que la ampara van a perdurar además elevadas a imperativos absolutos gracias a la Academia. Y van a perdurar hasta ese momento cuando ya sí se constata la belleza ya no tanto como entendimiento, sino la belleza en este casocomo experiencia y complacencia sensorial.
Hasta entonces y de acuerdo con el espíritu ilustrado de la centuria, la razón será el único criterio válido en la decisión última sobre la belleza. De manera que la belleza sigue estando encorsetada en ese rígido esquema de antaño, prestándose entonces a muy escasas variaciones. De hecho, resulta que esa concepción se va a agudizar cuando el clasicismoresurja como Neoclasicismo y resurge para hacer frente al Rococó que en la primera mitad de siglo se ha atrevido a aproximar la belleza a esa conceptualización de la belleza, es decir, a la belleza de tipo moderno.
Por eso, durante el siglo XVIII, la belleza seguirá identificándose con los objetos constituidos racionalmente. Los objetos que atienden a la vieja idea de orden, proporción y númeroy en su aplicación eminentemente artística.
Las escenas proporcionadas y ordenadas, son las consideradas socialmente bellas y las que no se atienen a esos criterios, no lo son.
El juicio de la razón en toda esta época sigue siendo el buen juicio porque es el juicio capaz de trascender la particularidad, el relativismo, el capricho de la impresión subjetiva y es el juicio que se acerca hasta laverdad absoluta y universal de las cosas.
Entre los defensores del juicio de la razón, en el siglo XVIII tenemos a un autor como es Crousaz. Escribe un tratado en 1715 dedicado enteramente a la belleza. Ya desde las primeras páginas se constata que su postura, siendo objetivismo, se mueve dentro de unos términos bastantes moderados. La belleza ya no se entiende como una cualidad de losobjetos, sino como un modo de relación entre ese objeto y el sujeto que lo tiene en frente. En esa relación, caben dos alternativas posibles:
1. Aprobación. Nos referimos a la idea de tipo racional.
2. Agrado. Estamos hablando de sensaciones.
Las dos confluyen ahora en la belleza (idea, razón junto a sensación).
En el caso de la aprobación, la belleza es natural y en el del agrado, la belleza esconvencional.
La belleza natural es una belleza de procedencia natural y como tal es objetiva. De esa manera tiene un carácter permanente. Es susceptible de variación.
En esa duplicidad de caracteres creía haber encontrado esa fragmentación del gusto desde el Renacimiento frente a la uniformidad que se había demostrado hasta entonces.
De todos modos, donde la moderación de Crousaz se poneparticularmente de relieve es en la distinción llevada a cabo entre el agrado que implican solamente los sentidos y la emoción que embarga al hombre completo.
La postura de Crousaz no dejó de ser en ningún momento objetivista y lo importante para él era la unidad en la diversidad, es decir, la variedad a la belleza convencional viniese siempre regulada por la uniformidad de la belleza natural. Eraotro modo de decir que la razón era la que tenía la última palabra en la solución sobre el arte. Sin su aprobación no habría belleza alguna y eso es lo que explicaba que los modelos clásicos habían perdurado durante tanto tiempo.
Un contemporáneo de Crousaz como sería Du Bos, también escribe un tratado sobre la belleza donde dice que la sensibilidad no se hable un hueco dentro de la razón, sino quelo importante y el fundamento de lo bello es la emoción, la pasión y el sentimiento. En cuestión de gustos, todo se reduce a las emociones experimentadas que son siempre anteriores a la reflexión. De este modo, es el sentimiento el que se pronuncia sobre la belleza sin pasar por el filtro emocional. Esto es lo que explica que sea posible sentirse conmovido ante un objeto antes de determinar si...