ETICA BIB
Páginas: 36 (8753 palabras)
Publicado: 29 de junio de 2014
CODIGOS DE ÉTICA DE LOS BIBLIOTECARIOS Y OTROS PROFESIONALES DE LA INFORMACIÓN: COMENTARIO Y ANÁLISIS COMPARATIVO.
Margarita Pérez Pulido
Universidad de Extremadura. Facultad de Biblioteconomía y Documentación..
Correo Electrónico marga@alcazaba.unex.es
1. Introducción.
En 1939 la American Library Association (ALA) reconocía la importancia de recopilar en un código losprincipios básicos por los que se guían los bibliotecarios en el ejercicio de su actividad, y la necesidad de darlos a conocer. La declaración de principios codificada vio la luz en 1948 con el nombre de Library Bill of Rights y puede considerarse el primer código deontológico elaborado por bibliotecarios, publicado para su difusión.
En opinión de Robbins1, la adopción de este código es productode la respuesta de la ALA a los cambios acaecidos respecto a la censura en los años 50. La era McCarthy y los acontecimientos bélicos producidos en Europa provocan que el papel de las bibliotecas y de los bibliotecarios cambie hacia el deber de educar para la democracia, ir contra la censura de libros y protegerse de posibles ataques convirtiéndose en una fuerza organizada. Esta idea, según elmismo autor, procede del sociólogo Bernard Berelson, el cual en 1938 instó a los bibliotecarios a abandonar su mito de imparcialidad ante la democracia o la dictadura, la inteligencia o el prejuicio, el bienestar social o los intereses particulares. La biblioteca como institución debe permanecer activa en favor de la educación y el conocimiento.
La base, pues, sobre la que se sustenta el primercódigo de ética bibliotecario es el principio de libertad intelectual, desarrollado en unos puntos de corte aspiracional que pretenden ser una guía de conducta profesional y reflejan el interés de los bibliotecarios por resistirse a fuerzas externas en el ejercicio de su profesión, protegidos por algunos elementos legales. Este principio continúa presente en la primera revisión del código realizadaen los años 60, cuyo texto se vuelve más expresivo respecto al concepto de libertad intelectual como responsabilidad social. Es en este momento cuando se crean los primeros grupos de presión a favor de las minorías contra la discriminación, que demuestran un serio compromiso con la sociedad2. Previamente, la ALA había publicado ya varios estudios sobre la historia de la libertad intelectual.Además de principios y valores, el elemento legal se encuentra presente en el código de ética de la ALA. Esto resulta una cuestión un tanto conflictiva para Wiegand3 que acusa a este código de ausencia de peso disciplinario y apoyo legal. Defiende que, en general, los códigos de ética, aún los que se caracterizan por un corte disciplinario, constituyen únicamente de una guía de conducta que tomacomo referencia un marco legislativo general al que habrá que recurrir en caso de conflicto. De este modo, en su opinión, un código de ética no ofrece protección legal a los bibliotecarios, sino son las instituciones jurídicas las que, una vez llevada a cabo una denuncia, aplican la ley. Tal es el caso de los bibliotecarios franceses hace unos años cuando se enfrentaron a un problema de censura enlas bibliotecas, cuya resolución supuso la aplicación de la legislación sobre este asunto y la sentencia de un tribunal por primera vez en Francia acerca de la libertad de expresión en las bibliotecas4.
En muchas ocasiones surgen contradicciones entre lo que dice la ley y los principios que defienden los códigos, y se plantean dudas acerca de cuál es la manera correcta de actuar5. La Declaraciónde los Derechos Humanos, las constituciones de los diferentes países, las leyes de bibliotecas que rigen en ellos, sin olvidar las normativas concretas acerca de cuestiones como el copyright, la propiedad intelectual o la protección de datos, se encuentran implícitas en la redacción de los códigos deontológicos, aunque en algunos casos la norma resulta injusta, sobre todo en cuestiones...
Margarita Pérez Pulido
Universidad de Extremadura. Facultad de Biblioteconomía y Documentación..
Correo Electrónico marga@alcazaba.unex.es
1. Introducción.
En 1939 la American Library Association (ALA) reconocía la importancia de recopilar en un código losprincipios básicos por los que se guían los bibliotecarios en el ejercicio de su actividad, y la necesidad de darlos a conocer. La declaración de principios codificada vio la luz en 1948 con el nombre de Library Bill of Rights y puede considerarse el primer código deontológico elaborado por bibliotecarios, publicado para su difusión.
En opinión de Robbins1, la adopción de este código es productode la respuesta de la ALA a los cambios acaecidos respecto a la censura en los años 50. La era McCarthy y los acontecimientos bélicos producidos en Europa provocan que el papel de las bibliotecas y de los bibliotecarios cambie hacia el deber de educar para la democracia, ir contra la censura de libros y protegerse de posibles ataques convirtiéndose en una fuerza organizada. Esta idea, según elmismo autor, procede del sociólogo Bernard Berelson, el cual en 1938 instó a los bibliotecarios a abandonar su mito de imparcialidad ante la democracia o la dictadura, la inteligencia o el prejuicio, el bienestar social o los intereses particulares. La biblioteca como institución debe permanecer activa en favor de la educación y el conocimiento.
La base, pues, sobre la que se sustenta el primercódigo de ética bibliotecario es el principio de libertad intelectual, desarrollado en unos puntos de corte aspiracional que pretenden ser una guía de conducta profesional y reflejan el interés de los bibliotecarios por resistirse a fuerzas externas en el ejercicio de su profesión, protegidos por algunos elementos legales. Este principio continúa presente en la primera revisión del código realizadaen los años 60, cuyo texto se vuelve más expresivo respecto al concepto de libertad intelectual como responsabilidad social. Es en este momento cuando se crean los primeros grupos de presión a favor de las minorías contra la discriminación, que demuestran un serio compromiso con la sociedad2. Previamente, la ALA había publicado ya varios estudios sobre la historia de la libertad intelectual.Además de principios y valores, el elemento legal se encuentra presente en el código de ética de la ALA. Esto resulta una cuestión un tanto conflictiva para Wiegand3 que acusa a este código de ausencia de peso disciplinario y apoyo legal. Defiende que, en general, los códigos de ética, aún los que se caracterizan por un corte disciplinario, constituyen únicamente de una guía de conducta que tomacomo referencia un marco legislativo general al que habrá que recurrir en caso de conflicto. De este modo, en su opinión, un código de ética no ofrece protección legal a los bibliotecarios, sino son las instituciones jurídicas las que, una vez llevada a cabo una denuncia, aplican la ley. Tal es el caso de los bibliotecarios franceses hace unos años cuando se enfrentaron a un problema de censura enlas bibliotecas, cuya resolución supuso la aplicación de la legislación sobre este asunto y la sentencia de un tribunal por primera vez en Francia acerca de la libertad de expresión en las bibliotecas4.
En muchas ocasiones surgen contradicciones entre lo que dice la ley y los principios que defienden los códigos, y se plantean dudas acerca de cuál es la manera correcta de actuar5. La Declaraciónde los Derechos Humanos, las constituciones de los diferentes países, las leyes de bibliotecas que rigen en ellos, sin olvidar las normativas concretas acerca de cuestiones como el copyright, la propiedad intelectual o la protección de datos, se encuentran implícitas en la redacción de los códigos deontológicos, aunque en algunos casos la norma resulta injusta, sobre todo en cuestiones...
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