Etica Para Amador

CAPITULO VII PONTE EN SU LUGAR
Robinson Crusoe pasea por una de las playas de la isla en la que una inoportuna tormenta con su correspondiente naufragio le ha confinado. Sabe como arreglárselas para llevar más o menos su buena vida de naufrago solitario. De pronto, se detiene con sobresalto en la arena blanca, se dibuja una marca que va a revolucionar toda su pacifica existencia: la huella deun ser humano.
Robinson ya está acostumbrado a hacerse preguntas desde que llego a la isla y resolver los problemas del modo más ingenioso posible: pero ahora la situación no es igual porque ya no tiene que vérselas con acontecimientos naturales o hambre sino con otro ser humano.
Cuando encuentra la huella de viernes en la arena de la playa empiezan sus problemas éticos. Ya no se tratasolamente de sobrevivir, ahora tiene que empezar a vivir entre hombres lo que hace humana a la vida es transcurrir en compañía de humanos. La ética no se preocupa de cómo alimentarse mejor lo que le interesa es lo que constituye su especialidad: como vivir bien la vida humana, la vida que transcurre entre humanos. ¿Hasta que punto era viernes semejante a Robinson? Pese a tantas diferencias también hayentre ellos algo fundamentalmente parecidos como por ejemplo, ambos hablaban.
Robinson y viernes eran capaces de valorar los comportamientos de saber que uno puede hacer ciertas cosas que están bien y otras que son por el contrario malas. Hay gente que roba, miente y mata, quien roba miente, traicionado abusa de cualquier modo de uno no puede dejar de ser humano, se trata siempre de seres humanosque sin dejar de serlos se comportan de manera poco recomendable, quien hace algo detestable, como sique siendo humano puede volver a transformarse en lo más conveniente para nosotros. La mayor parte de nuestro comportamiento y de nuestros gustos la copiamos de los demás. Por eso es caso seguro que en la mayoría de los casos nos tratan tan como se vean tratados.
¿En qué consiste tratar a laspersonas como personas, es decir, humanamente? Consiste en que intentes ponerte en su lugar comprende desde dentro adoptar por un momento su punto de vista. Tener conciencia de mi humanidad consiste en darme cuenta, y no solo ponerse en su lugar de otro: se trata de tomar en cuenta sus derechos, derecho humano a que alguien intente ponerse en su lugar y comprender lo que hace y lo que siente.CAPITULO OCTAVO TANTO GUSTO
Cuando la gente habla de moral y sobre todo de inmoralidad, el ochenta por ciento de las veces trata algo referente al sexo. El que esta malo es quien cree que hay algo de malo en disfrutar. Somos un cuerpo, sin cuya satisfacción y bienestar no hay vida buena que valga. Una de las funciones indudablemente importantes del sexo es la procreación. Pero la experienciasexual no puede limitarse simplemente a la función procreadora.
Los animales son quienes solo emplean el sexo para procrear, lo mismo que solo utilizan la comida para alimentarse; los humanos, en cambio, han inventado el erotismo y la gastronomía. El sexo en los hombres produce otros muchos efectos por ejemplo la poesía lirica y la institución matrimonial.
Lo que se agazapa en toda esa obsesiónsobre la inmoralidad sexual no es ni más no menos que uno de los más viejos temores sociales del hombre: el miedo al placer. A lo largo de los siglos, las sociedades siempre han inventado evitar que sus miembros se aficionasen a darle marcha al cuerpo a todas horas olvidando el trabajo, uno nunca se siente tan contento como cuando goza.
El placer nos distrae a veces más de la cuenta, por eso losplaceres se han visto siempre acosados por tabúes y restricciones, cuidadosamente racionados, permitidos solo en ciertas fechas.
Están quienes disfrutan no dejando disfrutar. Tienen tanto miedo a que el placer les resulte irresistible, se angustian tanto pensando lo que les puede pasar si un día le dan de verdad gusto al cuerpo, que se convierten en calumniadores profesionales del placer. A los...