Eutanasia. La muerte buena

La Muerte Buena
Jan M. Broekman
 
Mi tesis es, que la medicina, la bioética, y particularmente la ética médica tratan la eutanasia como un cuadro clínico. Quien utiliza la palabra "eutanasia", hace referencia a los fundamentos de nuestro actuar cotidiano y no a un problema médico o moral claramente delimitado.
Por lo demás, lo que se plantee en nuestras discusiones es siempre la muerte y elmorir de otra persona; nuestra capacidad de compasión no da para más. Es difícil imaginar nuestra propia muerte, y ciertamente no cuando se discute sobre la eutanasia o cuando ésta es resultado de una intervención médica. Los médicos y enfermeros reconocen que pueden actuar cuando se trata de la muerte de otra persona, pero la situación contraria les resulta inimaginable. Estos aspectos de laproblemática de la eutanasia muestran que el problema es, ante todo, un espejo de nuestra sociedad, de sus valores y normas fundamentales; lo que la imposibilita de imaginar la muerte propia a nivel individual. En el margen de la vida se encuentra la muerte. ¿Qué significa esta afirmación?
Eutanasia
Es interesante destacar que la palabra eutanasia proviene de dos palabras griegas, "eu" y "thanatos","buena" y "muerte". Esta palabra es una creación artificial, pues no existía en el griego antiguo ni en la conciencia desarrollada en ese momento. Pero sí descubrimos sentimientos en la Grecia Antigua en torno al sentido del "buen morir", que se suponía un fallecimiento en buenas circunstancias sociales y morales. La finalidad del ser humano era, de acuerdo con ese sentimiento de vida, cuidarsebien y correctamente. Esta idea era ya un punto de partida fundamental para Hipócrates.
Nuestra palabra y concepto eutanasia pone en evidencia un pensamiento enteramente distinto, en que la "muerte buena" es el resultado del actuar de otra persona, el médico, excluyéndosela del cuidado que le corresponde a cada uno. El concepto se puso de moda a partir de la Segunda Guerra Mundial, debido a losexperimentos médicos con personas en los campos de concentración. En general, dicho concepto es indicio del poderío técnico-médico y de la autoevidencia institucionalmente aceptada que el médico interviene en la vida humana, para darle fin. El crecimiento e intensificación del poderío técnico de la medicina también es posterior a la Segunda Guerra Mundial. Los médicos prefieren no escuchar laconsecuencia filosófica de esta situación, a saber, que todos los problemas que planteamos con la eutanasia encuentran su marco más amplio en la actitud médica presupuesta en cada intervención en la vida humana.
Homicidio y actuación médica
No hay que olvidar que nuestra sociedad concibe la eutanasia como una forma especial de intervención médica. Si una persona, que no es médico, efectúa unaeutanasia, no estamos ante una actuación médica (pues no se encuentra capacitado para ello), sino que comete un delito de homicidio. Es así de sencillo. Corresponde al derecho resolver esa trivialidad, aceptándose de manera general este punto de vista jurídico.
Sin embargo, no siempre es fácil establecer los límites de la eutanasia. Es necesario distinguirla, por ejemplo, del suicidio. Este último esun dark number, un fenómeno importante y frecuente entre los jóvenes del mundo occidental; numéricamente hablando, es más significativo que la eutanasia. Pero el suicidio no es una actuación médica, incluso cuando se utilicen para ello determinadas píldoras o medicamentos. Hace poco se desató una fuerte controversia en Francia con el fin de establecer si un manual de suicidio (que incluía, bajo laforma de un manual médico, todo tipo de indicaciones para un suicidio bueno, correcto e indoloro) podía ser vendido en el mercado. El suministro médico correcto y no penalizado de dichos medios evitaría el dolor y situaciones indeseables a quien desea la eutanasia. Al parecer, no siempre puede ser una forma de suicidio la que una persona consienta la intervención de su médico. ¿Qué incita a una...