Eutanasia

CASO VIGNETTE
John Wallace es un hombre de 72 años de edad con cáncer de páncreas metastásico. Al momento del diagnóstico, el cáncer era metastásico a sus ganglios linfáticos regionales y el hígado. El paciente fue tratado con quimioterapia paliativa, pero la enfermedad siguió avanzando. Recientemente se ha convertido en ictericia, y él tiene muy poco apetito. Él ha estado viendo a un médicode atención paliativa y un trabajador social de manera permanente. Su dolor abdominal está bien controlada con narcóticos en dosis elevadas, pero los narcóticos ha causado estreñimiento. Además de ver a la trabajadora social, también ha estado viendo a un psicólogo para ayudarle a hacer frente a su enfermedad.
Mr. Wallace ha estado casado con su esposa, Joyce, durante 51 años, y tienen tres hijosy seis nietos. Él y su esposa han vivido en Salem, Oregon, durante los últimos 23 años y la mayor parte de su familia vive en los alrededores. Él entiende el pronóstico de la enfermedad, y no quiere pasar sus últimos días el sufrimiento o en un estado que no responde. Él habla de su deseo de eutanasia con su esposa y sus familiares, y le ofrecen su apoyo. Al día siguiente, él llama a su médico yle pide información sobre el suicidio asistido por un médico.
OPCIONES DE TRATAMIENTO
¿Cree usted que el señor Wallace debe ser capaz de recibir medicamentos terminación de la vida de su médico? ¿Cuál de los siguientes enfoques de la cuestión más amplia ¿Le parece adecuada? Base su elección en la literatura publicada, de su propia experiencia, y otras fuentes de información.
Para ayudar en sutoma de decisiones, cada uno de estos enfoques se defiende en los siguientes ensayos cortos por expertos en el campo. Dado su conocimiento del paciente y las observaciones hechas por los expertos, que opción te quedarías? Haga su elección y ofrecer sus comentarios en NEJM.org.
Opción 1 : el suicidio asistido no se debe permitir
Opción 2 : el suicidio asistido se debe permitir la
OPCIÓN 1
Elsuicidio asistido no debe permitirse
J. Donald Boudreau, MD, Margaret A. Somerville, AuA (pharm.), DCL
Reconocemos que un paciente en la situación del señor Wallace está en un estado de dolor. Apreciamos su deseo de estar en su sano juicio al final de su vida y no tener que sufrir como la muerte se acerca. Reconocemos también las obligaciones de los médicos a respetar el rechazo del tratamiento deun paciente, para aliviar el dolor y el sufrimiento, y para proporcionar los cuidados paliativos. Sin embargo, creemos que el arte de curar siempre debe seguir siendo el núcleo de la práctica médica, y el papel de sanador implica proporcionar a los pacientes con la esperanza y aspiraciones renovadas, por tenue y temporal. En el ámbito de los cuidados paliativos, existe una paradoja bien conocidaque se puede morir sanado. 1 Los médicos tienen el deber de respetar el espacio de sanación sagrada - no destruirla. Por lo tanto, los médicos deben escuchar la petición del Sr. Wallace para la muerte, pero nunca llevarlo a cabo.
Los partidarios del suicidio asistido por médicos justifican su posición colocando el valor de la autonomía individual por encima de todos los demás valores yconsideraciones éticas. Dar prioridad absoluta autonomía individual que se extiende pasar por encima de la competencia los valores, las protecciones y las necesidades e ignora los efectos nocivos sobre otras personas, instituciones sociales (la profesión médica en particular), y la comunidad en general.
Permitir el suicidio asistido por un médico crea una pendiente resbaladiza que inevitablemente conduce aun mayor acceso a intervenciones de suicidio asistido - y abusos. Los defensores de la eutanasia niegan que existen pendientes resbaladizas, con el argumento de que las restricciones legales y salvaguardas administrativas son eficaces en la prevención de ellos. Pero la evidencia es clara en contrario, como afirmó recientemente el Alto Tribunal de Irlanda. En defensa de la constitucionalidad de la...