Evento masivo

Juan Sebastián Weiss Romero Código: 201220356
Comunicación Audiovisual y Multimedia Introducción a la Comunicación

RÍASE EL SHOW

Este es un show que se presenta en el Teatro la Castellana con una duración aproximada de 100 minutos y capacidad de 714 personas, una comedia que critica desde la política y la seguridad hasta la imagen que otros países tienen de nuestra amada Colombia. Acontinuación contaré la historia y toda la experiencia de manera detallada desde mi perspectiva, cabe aclarar que esta contiene los puntos del trabajo en su contenido.


Llegas un domingo a las 5pm bañado en lluvia solo para entender que, como código de vestimenta, toda persona en el lugar menos tú está de traje o al menos de camisa abotonada –para los hombres- y, falda y balaca –para lasmujeres-. Caminas esquivando charcos y nadas entre un mar de personas que te miran cometiendo un asesinato mental, llegas a la caja y con toda la confianza pides un boleto con Descuento para Estudiantes, preguntas su precio mientras sostienes un billete de 20.000$ el cual violentas al comprender que, con descuento, la boleta te cuesta 36.000$; tras comprarla entras con las manos vacías al igual que tuestomago y el único lugar que encuentras para esperar y huir de la lluvia es un Oma al cual no puedes entrar si no vas a consumir algún producto.

Conforme caminas siendo marginado notas el común entre las personas que están adentro, cosas como el pelo arreglado o las gafas de marco grueso, cosas como un bolso de marca o una billetera de cuero puro, cosas que cubren el vacío conformista y tiñensu silueta de “clase y elegancia”. Entiendes que la fuerza o el “filtro” que los incentiva a ir al teatro no es el arte, ni siquiera la intención de apoyar a la misma, es el sentimiento de exclusividad que les ofrece. Solo el hecho de que los olores desagradables eran nulos o de que el sonido que predominaba era el de una música suave solo instrumental les daba la Falsa sensación de seguridad, depoder, de exclusividad y -colmando tu paciencia- notas también su pedante actitud desbordando un placer insensato y un conformismo hipócrita ante la vida misma. Puedo asegurar casi con certeza que más de uno no tenía la mínima idea del tema de la obra o siquiera la intención de saberlo.

Sales en busca de un cigarrillo –solo uno pues no te alcanza para más- y notas que los vendedores le duplicano triplican el precio, lo compras porque la gana es más que la pobreza y entonces de golpe lo entiendes: la razón del precio no es, ni siquiera, la cantidad de personas que fuman ahí, es su estrato; más que venderle un cigarrillo a la gente –al igual que con la boleta del teatro- le venden exclusividad, no por el cigarrillo en si, sino por el entorno en el que es fumado. Prendes tu cigarrillo yal levantar la cabeza ves que más de uno de los fumadores ni siquiera se pasa el humo, fuman creyendo que se ven más grandes, bohemios tal ves o de pronto más profundos e interesantes. Terminas de fumar y entras con boleto en mano al oír el primer llamado, entre más adentro estás menor es el ruido que oyes, por costumbre o tal vez por respeto –creería que por pena- la gente se queda callada alentrar.

Entras en busca de tu asiento pero la mala organización del teatro –como del país en sí- te lo impide, pides ayuda alrededor de cuatro veces antes de ser escuchado y tras 10 minutos logras sentarte pasando sobre unas cinco personas de las cuales solo una tiene la decencia de pararse para dejarte seguir cómodamente. La sala se ve dividida –al igual que el mundo en sí- por secciones donde lomejor lo reciben, no quienes lo necesitan, sino quienes pueden pagarlo. Sin que alguien te lo pida apagas tu celular y esperas ansiosamente a que empiece la obra, tus pensamientos suenan fuerte pero se ven opacados ante el incómodo sonido de más de 30 personas tecleando en sus celulares –posiblemente hablando con gente sin importancia de cosas vacías solo para hacer alarde de su participación en...