ex hacienda santa monica
La pasión por coleccionar acompañó a Don Antonio Haghenbeck y de la Lama, toda su vida. Los documentos que se encuentran en losarchivosdel Museo Casa de la Bola, muestran que desde los 35 años de edad empezó a comprar sus primeras obras de arte. Su gusto por la arquitectura virreinal lo llevó a adquirirla Casa de la Bola que fue suresidencia permanente, así como la Hacienda de Santa Mónica y la Hacienda de San Cristóbal Polaxtla, donde pasaba temporadas de descanso. DonAntonio supo apreciar el valor arquitectónico de estos tresinmuebles, por lo que se encargó personalmente de su restauración. Además se esmeró en conservar las casas,edificios y objetos que heredó de sus padres: mobiliario, pinturas, libros, cortinas,candiles, fotografías y pequeñas cosas, aparentemente sin valor pero de gran interés,porque ilustran la vida cotidiana de tiempos pasados.
Adquirió y almacenó material de demolición como esculturas,herrería fina, puertas de madera, cantera tallada,escaleras y pisos de mármol, que rescató de casas antiguas ubicadas en la Ciudad de México, casas que pertenecieron a su familia y a personasconocidas.
Su interés comocoleccionista se centró principalmente en las artes decorativas, el grabado y la pintura, tanto de origen europeo como mexicano. Entre las mejores piezas de mobiliarioseencuentran gabinetes o escribanías estilo barroco, procedentes de Italia y del centro de Europa; destacan también bargueños, sillones fraileros, sitiales y arcones de Españay del México Virreinal, así comouna amplia colección de relojes tanto de caja grande (grand father) como de chimenea, objetos de porcelana y de plata mexicana.
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