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Mientras en estados unidos la guerra contra las drogas es un asunto principalmente delincuencial, en el que ningún narcotraficante espera asumir funciones de gobierno, en México y Colombia la guerra contra las drogas implica competencia por el gobierno de amplios sectores de la sociedad entre el estado y organizaciones criminales. Es la historia de los desencuentros entre el estado y lasorganizaciones criminales por imponer sus instituciones a lo largo de la geografía nacional y que involucran a poblaciones que nada tienen que ver con esta guerra. Entre menos era el nivel de modernización y de urbanismo de una sociedad, estaría más expuesta a organizaciones criminales.
El país azteca también tiene un fenómeno con narcotraficantes que no solo comercia droga sino que, además, regulansociedades. El autor plantea en la obra que la necesidad de protección del negocio es lo que lleva a los narcotraficantes a influir sobre el poder político. Al mismo tiempo eso genera un cambio, pues en una sociedad con Estado fuerte escasamente podrían ofrecer soborno a un político, mientras que en una sociedad marginal el criminal, además de tener capacidad de comprarlos, crea su propio ejército yasí es como comienza a apropiarse del poder.
Los mafiosos se vuelven un Estado paralelo, que brinda servicios de seguridad, cobra impuestos y hasta imparte su peculiar “justicia” a lo largo de la geografía nacional e involucran poblaciones que nada tiene que ver en esta guerra, entre menos era el nivel de modernización y urbanismo de una sociedad está más expuesta a organizaciones criminales.
Susmediadores también acumulan robustas cuotas de poder a través de la representación democrática. No se trata de ganarse los corazones de la gente sino someterlos por la fuerza, la gente termina aceptando. La gente en Colombia ha terminado aceptando la regulación por parte de organismos al margen de la ley que controlan mercados ilegales, desde los más criminalizados como la coca, a otros mástolerados como el contrabando. En ese tipo de transformaciones hay gente que termina dominado y otros que son dominados, en la mayoría de los casos obedecían no porque estuvieran satisfechos sino porque no tenían recursos ni respaldo social para revelarse.
Se creó una comunidad que obedecía normas y tenían comportamientos incoherentes con los del estado.
Sectores medios sin mayor dotación de capital,encontraron la oportunidad de convertirse en grandes empresarios por medio de economías informales, piratería, contrabando, etc. Con la disponibilidad de efectivo del narcotráfico.
Existen amplias actividades ilegales que por su amplia aceptación en sectores de la sociedad no reciben el mismo tratamiento de las autoridades. (Mercancía pirata) en cambio el vendedor de droga será tratado con mayorseveridad por el rechazo social. Los narcotraficantes se convierten en proveedores de necesidades materiales para reclamar posición en la sociedad. Las drogas fueron el mecanismo mediante el cual pudieron competir con la clase política de áreas ricas e influyentes.
Las oportunidades del narcotráfico no son solo para población marginada, también para políticos de la periferia que en muchos casos noprovienen de sectores excluidos, quienes ya pueden influir sobre el estado y el sistema político del centro. La sociedad sufre transformaciones complementarias entre sí: una nueva jerarquización a partir del acceso al consumo y hasta un punto una nueva división del trabajo.
El papel que se les asigna a los individuos en la producción por pertenecer a un grupo social. Esta nueva clasificación socialno necesita discursos sofisticados o grandes elaboraciones ideológicas.
Las normas, los valores y los comportamientos de las instituciones estatales ya no son necesarios para el narcotráfico.
Logran que la sociedad acepte la autoridad de una nueva organización criminal.
No se trata de un proceso de debilitamiento del estado y la democracia sino una construcción de instituciones de dominación...