Fabula
En el fondo del océano, vivía una familia de pececillos multicolores. Un día, la comunidad de
peces debía emprender un largo viaje en busca de alimentos y de mejores climas. Como el
viaje sería extenso coda pececillo joven había recibido de sus padres un mapa del océano
dibujado en una concha de colores. Así, si alguno se alejaba del grupo podría encontrar la ruta con la ayuda del mapa.
Sin embargo, entre los pececitos más jóvenes estaba bruno un travieso bailarín del mar que
solo pensaba en divertirse. _oye mama ¿sabes qué cosa es verde y dice “soy una rana”?
_ dejas tus bromas y prepárate para el viaje contestaba lana.
_!pues una rana que habla! ¡ ja ja ja !
En una de sus imprudentes salidas, bruno fue atacado por un feo cangrejo gigante. Se salvó
de milagro gracias a su agilidad ¡santo cielo había perdido su mapa y ahora no tenía cómo
orientarse si se perdía en el océano. Llegado el momento toda la comunidad de peces estaba lista para emprender el viaje.
_ ¿llevas tu mapa pequeño?_ preguntaba a lana a su hijo
_!claro mama! no me perderé por nada del mundo._ contestaba a bruno tratando de fingir
tranquilidad pues sentía vergüenza y no se atrevía ha ser sincero.
Apenas había empezado el recorrido cuando tuvieron que cruzar una corriente de agua
oscura y sin poder ver nada bruno describió que estaba totalmente solo.
_ ¿dónde están todos? Se preguntaba asustado. a partir de ese momento, buscó
desesperadamente el rastro de su familia pero todo parecía inútil. Milagrosamente Escapó de
los dientes de un tiburón, engaño a un pulpo para tomar un poco de comida y estuvo a punto
de ser atravesado por un pez espada. El pobre pececillo no podía de la angustia al final,
pensó que moriría solo y lejos de su familia y hubiese nacido si lana no hubiera nadado de ...
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