facultad

Descartes: Discurso del método. Parte 1 y 2:
Cada cual piensa lo que posee en tan elevada proporción que aunque aquellas personas más difíciles de contentar cuando se trata de cualquier otra cosa, se sienten satisfechas con el que les ha tocado de suerte y por lo general no desean aumentarlo. Si vos pensas en que Dios existe, le estas dando existencia a ese Dios por medio de tu pensamiento;aunque luego se compruebe que ese Dios en realidad no existe.
No es verosímil que todos se equivoquen en esta cuestión y eso prebe distinguir lo verdadero de lo falso, mas bien dicho esa facultad llamada buen sentido o razón, que es igual por naturaleza en todos los hombres.
La diversidad de nuestras opiniones se debe a que nuestra inteligencia sigue caminos diversos y a que no todos consideramospor igual las mismas cosas. No basta poseer una inteligencia clara, lo principal es aplicarla.
Los que caminan con lentitud, si siguen siempre el mismo camino, pueden avanzar mucho más de que quienes corren y se alejan por caminos extraviados.
La rapidez mental, la imaginación clara y distinta, la memoria amplia son cualidades que sirven para formar un espíritu perfecto.
Mi propósito no esenseñar el método que cada uno debe utilizar para guiar su propio bien o su razón, sino solamente dar a conocer la forma en que he dirigido la mía.
Descartes en su infancia fue atraído por el estudio y lo han persuadido por medio de este e inculcado que por medio de este se podía adquirir un conocimiento claro y preciso de todo lo que es útil en la vida, entonces fue su máximo deseo el de aprender.En cuanto termino su sus cursos y estudios, al cabo de los cuales se le considera persona docta (no aprender por voluntad sino obligado), cambio por completo su opinión, porque se hallaba completamente confundido entre tatas dudas y errores, que pensó que al instituirse no había sacado otro provecho que el de descubrir cuan profunda era su ignorancia.
Aprendió todas las ciencias y no estabacontentado con todas ellas sin embargo, leyó todos los libros que cayeron en sus manos de las materias más raras y curiosas. Además conocía los juicios que de su persona se hacían sus condiscípulos y nunca se consideró inferior.
Nuestro siglo le parecía más floreciente y fértil en espíritus grandes que ningún otro de los precedentes. Todo esto lo llevo a juzgar a los demás por sí mismo y a pensar queno había en el mundo una doctrina que satisficiera sus esperanzas.
A pesar de esto no dejaba de estimar y practicar los ejercicios que se realizaban en los colegios. Tenía en claro que era necesario examinar todas las ciencias hasta esas que parecen más supersticiosas (1) y falsas con el objeto de apreciarlas a todas en su justo valor y quedar cubierto de incurrir(2) posibles errores.
(1)Creencia que no tiene fundamento racional y que consiste en atribuir carácter mágico o sobrenatural a determinados sucesos o en pensar que determinados hechos proporcionan buena o mala suerte.
(2) Cometer una falta, delito o error.
Los relatos fabulosos nos hacen imaginar como posibles, acontecimientos que no son, y las historias más verídicas, si no cambian o aumentan el valor de las cosas parahacerlas más dignas de ser leídas, casi siempre omiten las circunstancias menos importantes es ilustres; de donde resulta que lo que llega hasta nosotros no aparece tal cual es y los que amoldan sus costumbres a los ejemplos extraídos de tales lecturas se exponen a caer en las extravagancias(3) de los paladines de nuestras novelas y a concebir designios (4) que se hallan fuera del alcance de susfuerzas.
(3) Raro o alejado de lo común o acostumbrado hasta el punto de resultar negativamente llamativo.
(4) Propósito o voluntad de hacer algo
Los que tienen fuerte capacidad de razonar y elaboran bien las ideas, a fin de hacerlas claras e inteligibles, serán siempre los mejor dotados para persuadir de cualquier cosa a sus congéneres (5), aunque hablen una lengua tosca (6)y nunca hayan aprendido...