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Páginas: 9 (2008 palabras)
Publicado: 26 de febrero de 2013
Colombia InVisible
por Fernando E. Larzabal
Trasfondo histórico
(lo que Dios ha hecho)
El Evangelio llego por primera vez a Colombia hace más de 150 años. El Señor ha bendecido ricamente a su pueblo y hoy contamos con miles de iglesias y una población cristiana que se acerca a los cuatro millones de personas.
Mientras se ha experimentado este notable crecimiento en la culturamayoritaria, solo unas pocas étnias han contado con la oportunidad de tener acceso al Evangelio y el número de las que lo han aceptado es aún mucho menor.
El avance hasta ahora logrado es el fruto de más de 50 años de trabajo que con dedicación y sacrificio han realizado cientos de obreros.
Lamentablemente en los últimos años el incremento de ese esfuerzo parece haberse detenido y de seguir así, nostomaremos por lo menos otros 50 años para lograr culminar la tarea.
El panorama
(la situación actual).
En Colombia, país excepcionalmente rico en culturas e idiomas, habitan alrededor de 100 comunidades indígenas integradas por cerca de 2.000.000 personas.
En más de cincuenta de estas comunidades se han llevado a cabo trabajos de traducción y 44 de ellas ya poseen el Nuevo Testamento en supropia lengua, pero todavía existen más de una docena de grupos étnicos en los cuales no se ha realizado ningún proyecto de traducción.
De estos cien grupos étnicos, solo 9 se pueden considerar “alcanzados” y en otros 38 hay cristianos en distintos niveles de crecimiento.
En otras palabras, más de la mitad de los grupos indígenas de Colombia todavía se encuentran sin acceso al Evangelio y másdel 90 % de ellos aún necesitan trabajo misionero.
Urgencia y oportunidad
(entendiendo los tiempos)
Mientras gran parte de la iglesia evangélica está abocada al crecimiento numérico de sus congregaciones, las etnias indígenas continúan siendo blanco de un sin número de colectividades políticas y religiosas cuya influencia atea los aleja del Dios que los creó y envió a su hijo parasalvarlos.
Afortunadamente la situación de orden público limita –aunque no impide totalmente- el acceso directo de estas organizaciones.
Este conflicto armado también afecta al movimiento misionero pero al mismo tiempo nos ofrece, por el momento, la oportunidad de prepararnos y entrenarnos de tal manera que no sean otros con sus agendas y estrategias humanistas las que nos lleven la delantera.
Ensegundo lugar, el orden público y otros factores sociales han producido el desplazamiento de los indígenas hacia las áreas urbanas de tal manera que por primera vez en la historia tenemos a miles de ellos literalmente “a la vuelta de la esquina” de donde vivimos y nos congregamos como iglesia.
El desafío.
(un camino a emprender)
Todo esto requiere de obreros que, respondiendo a algunas delas necesidades físicas de estas personas, trabajen en su formación espiritual y contribuyan así con el establecimiento de iglesias autóc-tonas y autónomas en sus étnias.
La magnitud de la tarea es tal que ninguna organización misionera o iglesia, por mas recursos que tenga, podrá cumplirla por sí misma.
No es suficiente con tener una iglesia nacional influyente y numerosa aún en lugarescercanos a los indígenas. Barreras culturales e idiomáticas hacen necesario la utilización de estrategias particulares para comunicar efectivamente el Evangelio de Cristo en cada grupo.
Los que estamos involucrados en misiones sentimos el desafío y percibimos la oportunidad de emprender un camino tal vez desconocido por la mayoría de nosotros. Este camino nos lleva a un territorio más allá denuestros recursos y capacidades. Este camino lo transitan solo aquellos que están dispuestos a estrechar lazos de cooperación compartiendo lo que han recibido del Señor. En ese espacio solo permanecen los que son capaces de entregar el control de la tarea sometiendo sus agendas individuales bajo una perspectiva global a favor de un más efectivo crecimiento del reino de Dios.
La propuesta.
(pasos a...
por Fernando E. Larzabal
Trasfondo histórico
(lo que Dios ha hecho)
El Evangelio llego por primera vez a Colombia hace más de 150 años. El Señor ha bendecido ricamente a su pueblo y hoy contamos con miles de iglesias y una población cristiana que se acerca a los cuatro millones de personas.
Mientras se ha experimentado este notable crecimiento en la culturamayoritaria, solo unas pocas étnias han contado con la oportunidad de tener acceso al Evangelio y el número de las que lo han aceptado es aún mucho menor.
El avance hasta ahora logrado es el fruto de más de 50 años de trabajo que con dedicación y sacrificio han realizado cientos de obreros.
Lamentablemente en los últimos años el incremento de ese esfuerzo parece haberse detenido y de seguir así, nostomaremos por lo menos otros 50 años para lograr culminar la tarea.
El panorama
(la situación actual).
En Colombia, país excepcionalmente rico en culturas e idiomas, habitan alrededor de 100 comunidades indígenas integradas por cerca de 2.000.000 personas.
En más de cincuenta de estas comunidades se han llevado a cabo trabajos de traducción y 44 de ellas ya poseen el Nuevo Testamento en supropia lengua, pero todavía existen más de una docena de grupos étnicos en los cuales no se ha realizado ningún proyecto de traducción.
De estos cien grupos étnicos, solo 9 se pueden considerar “alcanzados” y en otros 38 hay cristianos en distintos niveles de crecimiento.
En otras palabras, más de la mitad de los grupos indígenas de Colombia todavía se encuentran sin acceso al Evangelio y másdel 90 % de ellos aún necesitan trabajo misionero.
Urgencia y oportunidad
(entendiendo los tiempos)
Mientras gran parte de la iglesia evangélica está abocada al crecimiento numérico de sus congregaciones, las etnias indígenas continúan siendo blanco de un sin número de colectividades políticas y religiosas cuya influencia atea los aleja del Dios que los creó y envió a su hijo parasalvarlos.
Afortunadamente la situación de orden público limita –aunque no impide totalmente- el acceso directo de estas organizaciones.
Este conflicto armado también afecta al movimiento misionero pero al mismo tiempo nos ofrece, por el momento, la oportunidad de prepararnos y entrenarnos de tal manera que no sean otros con sus agendas y estrategias humanistas las que nos lleven la delantera.
Ensegundo lugar, el orden público y otros factores sociales han producido el desplazamiento de los indígenas hacia las áreas urbanas de tal manera que por primera vez en la historia tenemos a miles de ellos literalmente “a la vuelta de la esquina” de donde vivimos y nos congregamos como iglesia.
El desafío.
(un camino a emprender)
Todo esto requiere de obreros que, respondiendo a algunas delas necesidades físicas de estas personas, trabajen en su formación espiritual y contribuyan así con el establecimiento de iglesias autóc-tonas y autónomas en sus étnias.
La magnitud de la tarea es tal que ninguna organización misionera o iglesia, por mas recursos que tenga, podrá cumplirla por sí misma.
No es suficiente con tener una iglesia nacional influyente y numerosa aún en lugarescercanos a los indígenas. Barreras culturales e idiomáticas hacen necesario la utilización de estrategias particulares para comunicar efectivamente el Evangelio de Cristo en cada grupo.
Los que estamos involucrados en misiones sentimos el desafío y percibimos la oportunidad de emprender un camino tal vez desconocido por la mayoría de nosotros. Este camino nos lleva a un territorio más allá denuestros recursos y capacidades. Este camino lo transitan solo aquellos que están dispuestos a estrechar lazos de cooperación compartiendo lo que han recibido del Señor. En ese espacio solo permanecen los que son capaces de entregar el control de la tarea sometiendo sus agendas individuales bajo una perspectiva global a favor de un más efectivo crecimiento del reino de Dios.
La propuesta.
(pasos a...
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