Fattouch

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REFLEXIÓN

Hay un proverbio latino que dice así: “Oratur fit, poeta nascitur”, es decir; “El orador se hace, el poeta nace”. Parece yalejana aquella época en la que la oratoria y la retórica eran actividades practicadas y entrenadas por los ciudadanos con gran fervor. Lejos quedan también los grandes oradores como Cicerón,Quintiliano, Marco Antonio…
Hoy en día, en nuestro país, la oratoria ha quedado relegada a un segundo plano. En los colegios no se fomenta el arte de hablar en público, de persuadir y lo que es másimportante: el disfrutar realizando esto. Tendríamos que echar un vistazo a otros países lejanos y no tan lejanos como Inglaterra, Francia o Estados Unidos donde los estudiantes durante toda suvida académica están expuestos a hablar en público, a defender y exponer sus trabajos, sus opiniones…
No obstante, en las altas esferas laborales también ocurre esto. Grandes ejecutivos,directores o ya simples trabajadores que el tener que dar una conferencia o exponerse en público les produce un quebradero de cabeza, un agobio… desembocando en el miedo escénico.
Por tanto, en loscolegios desde pequeños se debería trabajar esta capacidad y habilidad humana porque será una herramienta útil y necesaria durante toda la vida. Se les debería inculcar el hábito de expresar susopiniones ante una clase, de exponer un trabajo realizado o ya el arte de la improvisación…pero todo mediante ejercicios prácticos porque la teoría en este campo de poco sirve.
Sin duda, en laprofesión que estoy estudiando: periodismo, el arte de seducir a la gente mediante las palabras no es útil es imprescindible. Hay que conseguir captar la atención del espectador y sobre todo quenuestro mensaje llegue al público traspasando las barreras imaginarias de la cámara y el televisor. Todavía, estamos a tiempo de ser los Cicerones del siglo XXI, en nuestras manos está.