Feliz navidad
las felicidades en esta celebración navideña y en el inicio del nuevo año;
pero no es fácil porque a veces los mensajes sevuelven repetitivos y esa no
es la idea. Sin embargo, este año tuve la maravillosa oportunidad de
compartir una cena en la célula a la que asiste mi hermana y muy aparte de
la riquísima comidaque me brindaron, el mensaje navideño fue muy especial y
quisiera transmitirles un poquito de él.
Me pareció sumamente interesante pensar en que nosotros siempre pedimos y
esperamos cosasmateriales como regalo de navidad, y nunca le pedimos a Dios
elementos que alimenten nuestra alma y nuestro espíritu. Por ejemplo, en
esta navidad esperemos bendiciones; que el Señor bendiga anuestros padres,
a nuestro esposo (o pareja), a nuestros hijos, sobrinos hermanos, abuelitos,
tíos, amigos etc; que bendiga nuestro trabajo, nuestra casa, nuestros
alimentos, entre otras cosasimportantes para nuestras vidas.
Imagino que muchas personas al leer este mensaje creerán que son solo
palabras, o dirán que esto no va con ustedes, tal vez ni siquiera terminen
de leerlo o mínimoestarán diciendo “la Lore ya se está haciendo hermanita”.
¿Adivine?
Lo importante de todo es que creo que en las cosas sencillas es en donde se
encuentra la verdadera felicidad, y ahí es en dóndeolvidamos buscarla. Es
parte de cada ser humano emocionarse con actos tan simples como cuando un
hijo dice papá o mamá por primera vez; cuando un esposo llega con una rosa
para su esposa sinmotivo alguno; como cuando llamamos a nuestros padres
para recordarles cuánto les amamos, sin importar la fecha; o cuando un
abuelo recibe en sus brazos por primera vez a su nieto; éstas y muchasmás
son cosas que nadie cambiaría, porque emocionan nuestro espíritu y nuestro
corazón, perduran por siempre y están al alcance de nuestros pensamientos
cada vez que queremos recordarlas....
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