Fernando de Resistencia

Fernando fue un perro vagabundo que vivió en la ciudad de Resistencia, capital de la provincia del Chaco. Poseía un instinto particular que lo hizo amigo de todos.
Sobre él se han realizado programas de televisión, poemas, cuentos, obras de títeres y el libro titulado "Fernando, un perro de verdad" de Hugo Ditaranto; hoy Fernando, tiene su propia canción y dos esculturas que lo recuerdanen su ciudad.
Su historia comienza en la década del 50; se dice que un día apareció en Resistencia un músico forastero con un perrito blanco que no se despegaba de su lado; se hospedaron en una humilde pensión y días más tarde, el hombre muere repentinamente.
Fue un perro peculiar pues entablo relación con el cantante Fernando Ortiz, que lo acompañaba a todas sus actuaciones y de el recibió sunombre.
Fernando paraba en la recepción del Hotel Colon (en ocasiones en El Viejo Rincón). A primera hora de la mañana entraba con los empleados al Banco de la Nación, donde desayunaba café con leche y medialunas en el despacho del gerente.
Luego vagaba sin prisa por las calles...o dormía un rato en el Sorocabana sin que nadie lo molestara.
A la hora del almuerzo se dirigía al Bar ElMadrileño, allí los mozos le servían su comida.
En casa del doctor Reggiardo hacia la siesta (un ladrido y un arañazo a la puerta era la contraseña para entrar). Y después de la siesta un poco de diversión... Su pasatiempo favorito era perseguir a los gatos en la plaza.



En 1954 se hizo la primera vacunación antirrábica en Resistencia. En la plaza se congregaron los perros de la ciudad y comoFernando andaba por allí, fue el primero en ser vacunado.
Le dieron la patente N 1 y lo nombraron "Primer perro civilizado de Resistencia".
Sin embargo, ni la patento N1 ni el título impidieron que una mañana, lo hombres de la perrera lo metieran, medio dormido, en la jaula del camión.
Por fortuna estaban cerca varios de sus amigos. Estos increparon a los perreros y se armo tal alboroto, que enla confusión, la puerta de la jaula se abrió y Fernando salió como un balazo, refugiándose en la Café Sorocabana.
Todos los años se repetía la tradición de la vacunación. Luego de su muerte, la patente N1 no se expidió más, siendo reservada simbólicamente a Fernando.
Al atardecer corría al Bar La Estrella a merendar con los dueños y la clientela. Le gustaban muchos los maníes, los picantes ylos dulces. Como era blanco se ensuciaba mucho, pero lo bañaban en cualquier casa, varias veces por semana.

Por aquellos tiempos, el bar La Estrella fue el más famoso de Resistencia. La clientela era variada. Allí se reunían los políticos de turno junto con empresarios, periodistas, historiadores, médicos distinguidos, abogados charlatanes, artistas noctámbulos y gente de paso.
Los hombrescharlaban, jugaban al truco o al tute, y se escuchaba tangos y conciertos en la enorme radio que había sobre el estaño.
Fernando concurría todos los días. Si lo invitaba a una mesa se sentaba muy serio, escuchando atentamente mientras comía.
Una noche que hacia mucho frio, le dieron grappa con azúcar. Al principio no le gusto, pero después empezó a pedir mas. Cuando se fue le costo bajar de lasilla, y caminaba de costado, totalmente borracho.
Cierats vez alguien le pego una patada. Fernando aulló de dolor y todos salieron en su defensa. Dicen que, al mismísimo Deolindo Bittel (el que fuera dos veces gobernador de la provincia) hubo que frenarlo para que no golpeara al agresor.

Fernando tenía un oído musical perfecto. Cuando algún músico o cantante erraba una nota, se ponía aladrar. Era un crítico riguroso.

Por las noches, Fernando recorría el bar Sorocabana, los bancos y el club social. Si había música, se quedaba. Si el lugar estaba tranquilo o el artista de turno no era de su agrado, se marchaba y seguía su camino.
No se perdía ninguna fiesta. Todo le atraía: Bodas, cumpleaños, espectáculos y bailes de carnaval. Su presencia era motivo de orgullo y si se aparecía...