FEST N SELV TICO

FESTÍN SELVÁTICO:Doña Manuela Prada de Rojas sonríe desde el cielo esta Navidad, al comprobar que su familia sigue reunida y preparando los avispa juane queincontables veces ella elaboró (¡preparó 1.200 para Mistura 2010!). Sus 10 hijos aprendieron de ella la ceremonia de preparación, para deleite de los comensalesde las seis sedes (una en Londres) de El Aguajal, a las que ella misma solía proveer.
Edgardo Rojas, su hijo, recuerda que ella era quien reunía a todos. ParaNochebuena preparaba carne de monte, de esa que ahora ya no se puede encontrar por la depredación, y que ha sido cambiada por el arroz ajuanado con gallina ymaduros fritos que Edgardo ha presentado para hoy.
“Hasta los 18 años la pasé en la selva, comiendo rosquitas de almidón de yuca en Navidad y haciéndola de pastor,una tradición que consistía en visitar nacimientos y bailar ante ellos”, recuerda el chef que, después de la cena tradicional, un día como hoy, solía ir con sufamilia al río, siguiendo la costumbre del Alto Mayo.
BLANCA NAVIDAD:En la Ciudad Blanca la familia Gaitán-Linares se congregaba en la casa de Characato de latía abuela de Blanca Chávez. Ella era la hija, la sobrina y la nieta mayor, así que, siendo niña, cada Navidad estaba rodeada de atenciones especiales. “Hacíanchancho porque era lo que criaban ellos mismos. También había ensalada rusa con mucha betarraga y de pallares, infaltable. Me cuenta mi tía que también hacíanpuré de ajos, una tradición que vino desde su abuela”, cuenta la dueña de El Rocoto que también recuerda haberle cantado con veneración al niño del nacimiento.