Festas De La Mercè

0. Presentación
En los últimos años, una amplia variedad de factores ha estimulado el turismo cultural, tanto en términos de demanda como de oferta. En el ámbito de la demanda cabe destacar la indiscutible importancia adquirida por el incremento del nivel de educación, así como por el crecimiento del sector de profesiones liberales, mientras que por el lado de la oferta ha resultado crucial paralas atracciones culturales la competencia entre destinos y la necesidad de fomentar ingresos adicionales (Richards, 2001). El crecimiento del turismo cultural se ha concentrado en atracciones permanentes, como los museos y los monumentos, que presentan un elevado grado de accesibilidad para los visitantes. Recientemente, sin embargo, se ha producido un notable incremento tanto en la demanda comoen la oferta de acontecimientos culturales para el turismo.
Como Felsenstein y Fleischer (2003: 385) señalan, «el uso de festivales locales para la promoción turística ha cobrado impulso en los últimos años en todo el mundo. Mientras en algunos casos se han reactivado o reformulado como acontecimientos turísticos consagrados actos locales de carácter cultural o religioso, en otros casos se haninventado y promocionado nuevos festivales con el único propósito de atraer nuevos visitantes a una ciudad o región».
El rápido crecimiento del flujo global de turistas asegura, incluso, su participación en aquellos acontecimientos culturales no programados de forma específica para el turismo. De hecho, la búsqueda de experiencias «auténticas» y peculiares de muchos turistas los conduce aacontecimientos tradicionales poco conocidos por la mayoría de turistas. Muchos comentaristas han expresado su preocupación por tales novedades, ya que perciben en el turismo una amenaza para la cultura tradicional. El turismo, indiscutiblemente, incrementa el espíritu comercial, privando al acto de su significado y devaluándolo como medio de identificación de la comunidad local. Paradójicamente, labúsqueda de autenticidad por parte del turista puede acabar siendo la causa de la pérdida de tal autenticidad.
Otros autores, sin embargo, han señalado la relativa resistencia de la cultura local, capaz habitualmente de utilizar los cambios culturales en su propio provecho. Schuster (2001), por ejemplo, sostiene que «al final los residentes se implican en los más exitosos (acontecimientos culturales)porque quieren hacerlo y piensan que, como resultado, esa participación enriquecerá sus vidas. ¿De qué otro modo puede uno explicar el crecimiento de los elementos tradicionales de participación ciudadana en, por ejemplo, los festivales catalanes: los grupos de castellers construyendo castillos humanos, la creación y exhibición de los gigantes emblemáticos de cada ciudad y cada vecindad, laimplicación de la gente joven en grupos de demonios para ofrecer el correfoc o la creación de las alfombras florales en la fiesta de Corpus Christi en Sitges?».
Aunque estos temas se han discutido ampliamente en la literatura especializada, pocos estudios incluyen la intención real de preguntar a los residentes locales qué piensan. Este caso, precisamente, se basa en entrevistas con los políticos localesy en los resultados de una encuesta efectuada durante las fiestas de la Mercè, la principal fiesta (festa en catalán) anual de Barcelona, la capital catalana. Las secciones siguientes describen la Mercè e identifican algunos de los temas principales que surgen en términos de relación entre el turismo y la producción y consumo cultural.
1. Las Festes de la Mercè. Origen y evolución
La Mercè es,efectivamente, la Festa Major de Barcelona. Las celebraciones en honor de Nuestra Señora de la Merced (La Mercè) tienen sus orígenes en 1868, cuando el Papa proclamó La Mercè como la santa patrona de Barcelona. El Ayuntamiento de Barcelona organizó las primeras Festes de la Mercè en 1871, y en esa época el acto estaba dominado por un sentido del espectáculo estético, con notable exhibición de...