Fetiches Sociales

Referencia a Fetiche positivo o negativo en Kopytoff, Clifford y Laclau.
Primeramente, podemos decir que en Kopytoff está presente una oposición entre la mercantilización y la singularidad de los objetos. De esta manera, el autor muestra interés en comprender aquellos mecanismos mercantiles que hacen que los objetos pasen a ser mercancías, y también como son estos objetos sustraídos de laslógicas de intercambio, no funcionando más como mercancías. Así, y basándose en la biografía de los objetos, son los sujetos quienes resuelven esta tensión constante entre aquello que es singular o aquello que se mercantiliza, pues toman una decisión con respecto a la posición que ocupará una cosa en el orden social; la particularidad de la vida de un objeto le permite sustraerse de las lógicas deintercambio y adquirir ciertos grados de singularización. Estamos entonces, frente a nociones de fetiche afirmativo, ya que la singularidad del objeto remite a su biografía, lo que le permite transformarse en cosa, tal como el lápiz de Lévi-Strauss, que pasó por manos de él, y por muchas manos con grados de individuación importantes hasta llegar a mí, que lo guardo como un tesoro en mi escritorio(ejemplo dado en clases).
Por otro lado, Clifford nos dice que los objetos se mueven entre fetiche afirmativo y negativo. Tenemos la idea del sujeto propietario, que dice sobre la figura del dueño de algo y que se opone al Big men que no acumula para poseer sino que redistribuir y mantener la paz y buenas relaciones sociales. Primero, para entender las colecciones hay que tomar al ser posesivo; comobuen coleccionista (con fines pedagógicos y públicos) y al mal coleccionista (fijación privada en objetos singulares, estamos acá frente a fetiche afirmativo en tanto idolatría, o bien, fijación erótica o fetiche negativo). Los museos crean la ilusión de la representación adecuada cuando saca a la cosa de su contexto, ocultando la historicidad específica del mismo y de apropiación, poniéndolo en unsistema de representación abstracta y total, sacándole las relaciones sociales que vienen con él. El museo es puro fetiche negativo, es freudiano, en tanto que es la colección de rasgos de una realidad imposible; la pieza tiene un poder o sacralidad y tiene una continuidad (fetiche afirmativo), pero al ser reinstalada en otro espacio se vuelve negativo. Los objetos pierden su misterio intrínsecoal ser reclasificados bajo lógicas occidentales. El ejemplo de los zuñi sirve para explicar esta dinámica de fetiche afirmativo y negativo, pues ellos ven en la figura misma la divinidad, no como una representación de lo divino, frente a los tipos del museo que quieren exhibir la figura (fetiche negativo) en tanto representación de un dios. Además de esto, tenemos que los espectadores del museotambién pueden ver a los objetos como representaciones de algo, pero que a nivel más íntimo pueden coincidir con sus propios fetiches, dejándose llevar por la particularidad de la cosa.
Finalmente, en Laclau tenemos puro fetiche negativo; la totalidad es conceptualmente imposible y paradójica, pero puede ser aprehensible desde la representación, ya que para ser totalidad debe oponerse a algo, queestá dentro de ella, pero que se sustraiga. Para representar este imposible se toma (arbitrariamente) un elemento del todo que represente al todo; estaría entonces dividido este elemento entre su particularidad material y su calidad de representador del todo, fenómeno denominado hegemonía (y funciona como significante vacío). La totalidad más que fundamento es un horizonte que hay que producirdiscursivamente, por lo que se hace necesaria una investidura radical (radical porque no hay nada que explique la elección del elemento representador) hacia el elemento. Esta investidura se explica por afecto, en donde la operación hegemónica funciona por retórica y catacresis. La unidad de análisis política para Laclau es la demanda, no los sujetos (no remite a algo pre existente); mientras más...