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La experiencia en general vale la pena, aunque siento que está mucho más enfocado a niños como de 7 a 12 años. Lo cual me parece muy bien porque es una muy buena edad para explicarles conceptos comoel crédito, la inflación, el valor de las monedas y como se producen las cosas. Para un adulto también es entretenido y se aprenden cosas nuevas.
También hay cosas que ya sabemos pero explicadas mása detalle y de forma amena. También ofrecen cursos de finanzas personales GRATIS. La única desventaja que tiene el museo es que está en el Centro Histórico de la Ciudad de México, que aunque eshermoso, es un poco caótico llegar y la única manera de llegar ahí es en en transporte público (metro, trolebús).
En la entrada del museo los orientadores de este nos explicaron del modo cómo funcionael boleto el cual resultó ser un método bastante interesante y hasta ese momento desconocido para mí ya que tenía en una base de datos la información de las salas que íbamos visitando con solopasar el código de barras que tenía impreso.
El concepto de este museo parte de la interactividad con la cual nos atrae hacia cada una de las salas de exposición ya que es fácil que nos detengamospor que el diseño es de lo más novedoso y creativo.
En la primera sala encuentro información de cómo poder darnos cuenta de las diferentes marcas de seguridad de los billetes que circulan en México:las marcas de agua, el tipo de papel bancario y el diseño de los grabados el cual antes de entrar ahí no tenía la idea de cuan laborioso es crear las imágenes para un billete hoy sé que aún se hacea mano.
Al entrar a la siguiente sala de exhibición encontramos que el museo se iba volviendo más interactivo cada vez. Empezaba con modelos de mercado, utilizando pantallas para hacer videocomentarios, en fin una gran variedad de actividades que tenían como propósito enseñarnos un poco más acerca de la economía del país.
En fin en el MIDE podemos encontrar diferentes maneras de ahorrar...