Filosofia Zombie
Ciencias de la Comunicación
y Humanidades
RESEÑA
Filosofía Zombi
Jorge FERNÁNDEZ GONZALO
por
Jorge Martínez Lucena
Universitat abat oliva CEU de Barcelona
Barcelona, España
Separata del número 8
de la Revista Comunicación y Hombre
reseÑa / REVIEW
recibido / received
18 de julio de 2011
páginas / pages
De la 163 a la 165
ISSN: 1885-365Xficha del libro / credits
Filosofía Zombi
autores / authors
Jorge FERNÁNDEZ GONZALO
editorial / publishing company
Anagrama, Barcelona, 2011, 213 pp.
E
n tiempos de crisis parece que la figura del zombi sigue encontrando espacio en
nuestro imaginario colectivo. Películas, series de televisión, video-juegos, cómics,
novelas, apps para móviles, flash-mobs, desfiles, ferias,fiestas y demás ocurrencias acerca de los muertos vivientes pueblan los proliferantes mercados de lo lúdico. Sin
duda, en el campo de la comunicación permanece la incógnita de la hipertrofia zombi
encarnada en productos de tanto éxito como The Walking Dead (Frank Darabont, 2010-),
la saga de Resident Evil, de la cual está prevista su quinta entrega el año que viene, o
películas tan interesantesy recientes como 28 días después (Danny Boyle, 2002), Zombis party (Edgar Wright, 2004), La tierra de los muertos vivientes (George A. Romero,
2005), Fido (Andrew Currie, 2006), Planet Terror (Robert Rodríguez, 2007), 28 semanas
después (Juan Carlos Fresnadillo, 2007) o Zombieland (RubenFleischer, 2009).
En este sentido, parece que el hombre actual usa su tiempo libre para exorcizar su
miedo ala alienación consumiendo productos relacionados con estos monstruos. Ése es
su modo de afrontar el propio pavor a que alguien (¿el anónimo poder?) devore su cerebro. Hay algo en nuestra modernidad ya madura que resuena siquiera inconscientemente
en los redaños de nuestra cultura festiva. Emmanuel Levinas lo verbaliza claramente en
su Totalidad e infinito (1961), convirtiéndose en profeta denuestras derivas sociológicoculturales: “La alimentación, como medio de revigorización, es la transmutación de lo Otro
en Mismo, que está en la esencia del gozo” (Levinas, 1997: 130). Lo dice el autor de la
obra que nos ocupa del siguiente modo:
el zombi no reconoce esa desmesura del otro, o más concretamente, no conoce la otredad,
y reduce a una equivalencia apetecible todo lo que sale a supaso. No es más que comida,
piensa el zombi, por lo que su mirada no distingue, no recula ante la morfología del rostro humano. Es incapaz de leer el placer o el terror de su víctima (Fernández Gonzalo, 2011: 85).
Por todo esto, ante Filosofía zombi, finalista del premio Anagrama de ensayo 2011, uno
lo primero que hace es pensar en la eterna reflexividad de la lechuza de Minerva. Si lafilosofía es el arte del pensar y en Occidente ésta se ha convertido en un hábito estrictamente nihilista y dominador tal y como ha denunciado Heidegger en su análisis de la
Revista Comunicación y Hombre · Número 8 · Año 2012
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reseñas
reviews
filosofía occidental poniéndolo en función de la técnica, podríamos decir que la metástasis
del “pienso luego existo” cartesiano ha devenido en “comoluego subsisto”. El zombi sería
pues el icono perfecto de este nuestro insistente hábito cultural de considerar no sólo la
realidad sino al vecino, al compañero, al amigo, al amante o a los familiares, esto es, al
otro, como mero combustible al servicio de nuestro egoísta disfrute. Así lo dice el autor:
“en esa reducción que la economía de mercado hace de todos y cada uno de nosotros
comoconsumidores no estamos muy lejos de esos otros consumidores por antonomasia
que son los no-muertos” (Fernández Gonzalo, 2011: 53).
En este sentido, la insistencia contumaz de nuestra cultura en esa carne apaleada y
apelmazada de los caminantes o merodeadores no es en absoluto gratuita, sino que sería
justificada por la más minuciosa inspección del estado de las cosas. Este libro intenta dar...
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