Flames traces, fragmento
Flame’s traces
Los rastros de las llamas
Capítulo 4 - Fanny
Seamos breves en este capítulo – mencionó Mark para comenzar la partida. Y tiraron cartas por doquier. El llevaba dosganadas, pero en ésta, perdió. Luigi sumo un punto más a su marcador. Era suficiente para el día de hoy, pasaba de la hora en la que debían retornar a sus respectivos hogares. Habían salido a comer albuffet de tacos en la plaza, y regresaron por una partida de póker aun siendo tan tarde. Salieron de la casa, se despidieron, y Mark regresó junto con Edwin a casa. Se separaron al llegar donde pasabael transporte que tomaría Edwin para continuar su camino de regreso, a unas cuadras de casa de Mark.
Mark llegó con la preocupación de que algo estrepitoso sonase en casa al llegar, pero no ocurriónada fuera de lo ordinario.
Cenó, y luego se dispuso a descansar, no sin antes tocar a su amada Fanny, a la cual le dedicaba horas de su tiempo, pues era parte de él.
La amaba tanto, tancomprometida era su relación entre ambos.
A ella le encantaba que la tocara, que la acariciara de arriba abajo, deslizando sus manos con cautela en todo su cuerpo.
Y a él le gustaba también. Le agradaba tantoque ella no se quejara en ningún momento de cómo la trataba (con cariño y un toque de perversión implícita al mismo tiempo). Le gustaban sus curvas, su piel, resplandor maravilloso que a cualquieraenamora a primera vista. De hecho, desde el primer día que se conocieron el uno al otro, desfallecieron ambas almas entre miradas largas y profundas.
Y Mark le dedicaba su tiempo, sin excepciones porpendientes de su trabajo o su estudio. Y Fanny a cambio de ello, le dejaba beber junto a ella, cuanto whisky deseara.
Que más se puede decir, disfrutaban tanto las melodías de Vivaldi juntos.
Fannytenía esa chispa, esa chispa que a Mark le encantaba. Le agradaba acostarse con él todas las noches, hasta conciliar el sueño, y le encima le gustaba el rock y el metal.
Mark era tan terriblemente...
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