Frases celebres
En el prefacio de su , tal vez, más popular novela, de la que se han vendido millones de ejemplares, Coelho señala el porqué de su interés por la Alquimia, es decir, por la Magia:Durante once años de mi vida estudié Alquimia. La simple idea de transformar metales en oro o de descubrir el Elixir de la Larga Vida ya era suficientemente fascinante como para atraer a cualquieraque se iniciara en Magia. Confieso que el Elixir de la Larga Vida me seducía más, pues antes de entender y sentir la presencia de Dios, el pensamiento de que todo se acabaría un día me desesperaba. Demanera que, al enterarme de la posibilidad de conseguir un líquido capaz de prolongar muchos años mi existencia, resolví dedicarme en cuerpo y alma a su fabricación.
Sin embargo:
A pesar de todami dedicación, los resultados eran absolutamente nulos. Era un sinfín de símbolos, dragones, leones, soles, lunas y mercurios, y yo siempre tenía la impresión de hallarme en el camino equivocado,porque el lenguaje simbólico permite un gigantesco margen de error.
Es claro que no logró su propósito. Sin embargo en el segundo intento al abrigo de RAM, su Maestro, descubrió que el lenguajesimbólico de la alquimia, era el único camino para alcanzar “el Alma del Mundo”, sin mencionar Coelho concretamente a que se refiere con esa ambigua expresión.
Pasé los siguientes seis años de mi vida enuna actitud bastante escéptica en relación a todo lo que tuviese que ver con el área mística. En este exilio espiritual aprendí muchas cosas importantes: que sólo aceptamos una verdad cuandopreviamente la negamos desde el fondo del alma (¿?); que no debemos huir de nuestro propio destino, y que la mano de Dios es infinitamente generosa, a pesar de Su rigor.
En 1981 conocía RAM, mi Maestro,que me reconduciría al camino que estaba trazado para mí. Y mientras él me entrenaba en sus enseñanzas, volví a estudiar Alquimia por cuenta propia. Cierta noche, mientras conversábamos después de...
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