Fundamentos del conocimiento en descartes

¿En qué medida es posible el conocimiento para Descartes sin la necesidad de recurrir a la idea de Dios?

Para responder a esta pregunta primero deberemos atender y desarrollar muy breve yacotadamente algunos puntos esenciales de los planteos de Descartes.
En su Segunda Meditación, ya planteada la hipótesis del Genio maligno y la duda hiperbólica y mediante estas, llega a dudar deabsolutamente todo, a lo que Descartes se sigue del siguiente modo:
“Pero ¿qué sé yo si no habrá otra cosa diferente de las que las que acabo de juzgar inciertas y de la que no pueda caber duda alguna? ¿Nohabrá algún Dios o alguna potencia, que ponga estos pensamientos en mi espíritu? No es necesario; pues quizá soy yo capaz de producirlos por mí mismo (…), por mucho que me engañe, nunca conseguiré hacerque yo no sea nada, mientras yo esté pensando que soy algo. (…) la proposición (…) “yo soy, yo existo” es necesariamente verdadera, mientras la estoy pronunciando o concibiendo en mi espíritu.” (2LasNegritas no pertenecen al original)
Mediante este razonamiento arriba posteriormente a la sentencia Cogito ergo sum (pienso, luego existo), la cual le proporciona una única certeza firme de la queasirse ante la posibilidad de que no exista cosa alguna indubitable. Ahora bien, a partir de aquí, sobreviene la problemática real acerca de si los planteamientos que realiza para poder justificar elconocimiento de cualquier otra cosa, e incluso de estos mismos por los cuales infiere el conocimiento de su propia existencia, están o no basados en la idea de Dios.
Descartes, se da cuenta de que laúnica veracidad que posee el cogito es el de serle una idea “clara y distinta” y establece sin más una regla general:
“que todas las cosas que concebimos muy clara y distintamente son verdaderas”Con un mínimo reparo del Genio engañador, considera que, como puede concebir clara y distintamente que él es y esto le resulta verdadero, otros juicios que también le son claros y distintos (como los...