Gaia: implicaciones de la nueva biología

Ensayo Curso Historia Natural
Universidad de Chile
Facultad de Ciencias
2010

“GAIA: implicaciones de la nueva biología”, 1989, Primera Edición

G. Bateson, J. Lovelock, L. Margulis, H. Atlan, F. Varela, H. Henderson, H. Maturana y otros

El texto analizado en este ensayo es una compilación de escritos de distintos autores pertenecientes a la asociación Lindisfarne, fundada en 1972 porWilliam Thompson, como una alternativa para el desarrollo de las ciencias tanto humanistas como naturales. El texto aborda el problema de la ciencia en cuanto al conocimiento y entendimiento de los seres vivos y su entorno, criticando la visión reduccionista que la ciencia ha tenido de los fenómenos naturales y sugiriendo la necesidad de una nueva biología que abarque a la comprensión de la unidadque es Gaia (Gea, nombre que utilizaban los griegos para denominar la Tierra).

En la antigüedad los fenómenos se atribuían a seres místicos o divinidades, ya que las herramientas que existían no permitían una observación más detallada de la naturaleza. Durante mucho tiempo, antes del conocimiento del microscopio, había existido una manera de pensamiento holográfica en la que se creía que elmacrocosmos era el reflejo del microcosmos, y se separaba a estos independizándolos uno de otro. Hoy en día sabemos, gracias a la microbiología, como los microorganismos son capaces de modificar importantes propiedades de los suelos, el agua, etc. y que lejos de estar independizados, los distintos niveles de “cosmos” se encuentran bastante interconectados, siendo incluso los organismospluricelulares hogar de muchos microorganismos (unicelulares).

Es importante destacar que durante la historia de la humanidad, existe una alta interdependencia entre lo que es el contexto social y cómo se formulan las hipótesis y teorías científicas. Un ejemplo de esto, que se da en el libro, es el de la teoría de la Selección Natural como mecanismo evolutivo. Esta teoría surge en un contexto en el queInglaterra se estaba adentrando en la era de la industrialización, en la que la optimización de los recursos y las funciones eran de primera importancia. No es extraño entonces creer que la forma de adoptaba la mentalidad de los ingleses y el resto de Europa hubiese podido influir en la formulación de esta teoría, que cómo sabemos hoy, no da cuenta muy bien del fenómeno evolutivo. Esto es lo queThompson denomina zeitgeist, es decir, el espíritu de la época, que tiñe todo desarrollo intelectual que se genere durante esta. Cabe entonces pensar que en una época de crisis (ambiental, económica, ideológica, etc.) como es la que estamos atravesando sea necesario cambiar la postura desde la que observamos la vida y es imperante el desarrollo de nueva biología y el estudio de sus implicaciones.Bateson se pregunta: ¿Qué pensar si: lo que podemos percibir de nuestro sí mismo es nuestra propia metáfora; y somos nuestra propia epistemología; y nuestro mundo interior es esa epistemología, nuestro microcosmos, y nuestro microcosmos es una metáfora apropiada del macrocosmos?[1]
Él sugiere, para responder esto, una “Ecología de la conciencia”, que es un nuevo estado de conciencia,donde las ciencias se encuentran más integradas y nos permite dejar de ver al mundo como fragmentos de algo y empezar a considerarlo como una unidad. También dejar atrás la idea de un mundo holográfico en el que cada organismo viene a ser, en cierto modo, un reflejo microcósmico de algo más grande, que es una red de ideas. Existe entonces una epistemología recursiva y, al mismo tiempo, unaepistemología de la recursividad. Bateson nos habla de esto una metáfora sobre Ouroboros, que es la evocación del círculo que no tiene principio ni fin:

“Estoy seguro de que si uno se educa en el mundo en el cual el pensamiento es preponderantemente lineal (y todos nos hemos educado en ese mundo), uno comprueba que resulta extraordinariamente difícil ver las vueltas del ouroboros, en el...