Garantias

Art. 22.
Esta norma señala que no pueden imponerse a los individuos penas de carácter infame, no obstante que sea grave el delito cometido o la irregularidad que esta persona presenta. También son penas infames la confiscación de bienes, en virtud de la cual se le quitan todas las propiedades a una persona con motivo de alguna deuda.
Para el crimen organizado es necesario tomar propiedad delos bienes de los delincuentes cuando éstos no pueden demostrar su legítima procedencia, sin embargo la reforma del artículo 22 señala que la disposición todos estos bienes no se califique como confiscación.
Art. 23.
Cuando un juez ha resuelto que una persona es delincuente se determina la primera etapa del juicio donde se obtuvo una solución al problema planteado; la cual puede ser revisada portribunales superiores para analizar si fue correcta y adecuada la sentencia.
En los términos del artículo en comentario, las revisiones que pueden ser planteadas por cualesquiera de las partes no podrán ser más de dos.
Después de que se ha terminado el juicio en todas sus revisiones no podrá volverse a analizar el mismo caso por ningún motivo. Nadie puede ser juzgado dos veces por el mismodelito.
La última parte de este articulo expresa que o es posible que el juez termine el juicio por medio de una sentencia, donde se diga que se absuelve al inculpado, con la posibilidad de que posteriormente se vuelva a iniciar otro proceso, por encontrarse datos que afectan a la persona que anteriormente fue favorecida con sentencia llamada “absolutoria”.
Art. 24.
Lineamientos de la reforma del28 de enero de 1992
Acorde con la libertad de creencias, la prohibición al Congreso de dictar leyes estableciendo o prohibiendo religión cualquiera que establecía un párrafo segundo del artículo 130 se sitúa, con la reforma, en el artículo 24, en su segundo párrafo y sin cambio en su redacción.
El primer párrafo ratifica la libertad de creencias y en concordancia con ésta, se imprime, mayorflexibilidad en la celebración de actos externos de culto público, de acuerdo con la ley reglamentaria.
DE esta forma se deja claro la distinción entre la libertad religiosa y libertad de culto, quedando la primera como irrestricta, por pertenencia precisamente a la conciencia individual, y la segunda bajo la supervisión de la autoridad porque incide en el ámbito del orden social. En la práctica, esconveniente precisar las actividades que de ordinario se deben realizar en los templos, de aquellas que se llevan a cabo fuera de ellos, de carácter especial, como las peregrinaciones, que son expresión de creencia y parte de las tradiciones más arraigadas en diversos grupos de la población.
Art. 25.
En una importantísima facultad del gobierno, expresada en el primer párrafo de este precepto,acerca de que: “Corresponde al Estado la rectoría del desarrollo nacional para garantizar que este sea integral y sustentable…” La esencia histórica de las constituciones se encuentra justamente en el reconocimiento de la soberanía de los gobernados quienes reclaman su posición dentro de la estructura del Estado y para ello se concibe la firma de la Carta Magna.
Cierto es que por la complejidadque adquieren las relaciones económicas en nuestros días, es menester reconocerle al Estado (termino equivoco que utiliza la ley, porque en realidad de lo que se habla es del gobierno del Estado) su función rectora en la economía, pero ello no debería haber supuesto la inclusión de un texto más apegado a la forma de una proclama que a la de una disposición constitucional.
Mejor fórmula hubierasido mantener el texto y espíritu de la Constitución vigente en materia de economía mixta, que ensayar en una reforma constitucional una aproximación a la concreción, que finalmente resulta en un texto inacabado, tendiente al estatismo e imprevisible en el resultado de su aplicación.
Art. 26.
El 7 de abril 2006 se publica en el Diario Oficial de la Federación el decreto que reforma el presente...