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El pasado 2 de Enero entró en vigor la nueva legislación que pretendía limitar o prohibir el consumo de tabaco en lugares públicos. Dicha ley ha causadoun gran revuelo y desacuerdo general enla sociedad Española, pero especialmente en el sector de la hostelería, ya que bares, restaurantes y locales de ocio nocturno han experimentado una bajada debeneficios considerable. Hace años,fumar en lugares como carnicerías o en el interior de un transporte público era estereotipado, mientras que hoy en día tal acción es impensable; al fin y al cabo, lasociedad se ha adaptado a dichasituación y ha optado por lo adecuado. Mientras tanto, la actual ley antitabaco sigue el mismo cauce que la pasada reforma de 2006.
No obstante, los hostelerosmantienen que la nueva leyimplicará una paulatina decaída de beneficios. A pesar de estos datos, el Comité Nacional de Prevención contra el Tabaquismo insiste en que otros países europeos donde están envigor restriccionessimilares no han repercutido negativamente en el negocio y que por lo tanto, prohibir el tabaco no tendrá coste económico en la hostelería. Pero, como es de esperar, el consumo deltabaco disminuirá,y esto traerá una menor fuente de ingresos a España, hecho que en época de crisis es poco propicio; además, incumplir la nueva ley antitabaco conlleva multas de 30 a 100.000 eurospara fumador ydueño del local. Por no incluir, el enfado general que ésta ley supone para los ciudadanos.
Mientras que una cantidad ingente de la población Española se opone a ésta ley, muchosotros laconsideran beneficiosa. De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, fumar es considerado como el principal problema de salud pública en el mundo, por lo tanto, dejar éste hábito y respetarlosespacios sin humo beneficiará a fumadores activos e involuntarios. Asimismo, la nueva ley hará que haya menos muertes por cáncer de pulmón y con el fin de conseguir este objetivo se adoptarán.