genial

El retumbante sonido de la música incomodaba los oídos de Baekhyun, pero no hizo algún esfuerzo por alejarse de todo ese ruido. Estaba ebrio y no le importaba. Siguió moviendo su cuerpo al son dela música. Estaba celebrando. Todos esos años de sacrificio finalmente habían dado fruto. Había terminado la escuela de medicina; se había graduado y también había sido aceptado en el programa másexigente de toda Corea. Podía tener el privilegio de embriagarse sólo por esta noche.

“Sólo unos minutos más,” se dijo a sí mismo, mientras movía sus esbeltas caderas al ritmo de la música y agitabasus manos en el aire, sin preocupación.

Bailó un rato más antes de decidir irse. Había tenido suficiente. Era suficiente celebración por el día de hoy; aún tenía que descansar para estar bien ellunes. Sabía que todavía le quedaba el domingo, pero tenía que deshacerse de la resaca que le iba a dar al día siguiente.

Cuando estaba retirándose de la pista, sintió que alguien lo jaló de nuevohacia ésta. Largas manos se aferraban fuertemente a sus caderas, pegándolo hacia el cuerpo del extraño. El hombre comenzó a moverse, haciendo que Baekhyun se moviera también.

Baekhyun cerró sus ojosy dejó que el sujeto continuara con lo que estaba haciendo. No podía ver su rostro pero sabía que era alto. Muy alto para alguien pequeño como Baekhyun. El alcohol y humo que había consumido einhalado anteriormente nublaba su mente, así que cuando el extraño comenzó a llevárselo hasta la puerta, no le importó. No protestó, ni puso resistencia alguna.

Terminaron en el estacionamiento. Estabaoscuro y no había gente alrededor. El hombre rápidamente abrió la puerta de su auto y empujó a Baekhyun dentro de éste. El sujeto presionó sus ásperos labios contra el cuello de Baekhyun. Su bocaestaba abierta y comenzó a emitir fuertes gemidos una vez que el extraño acarició sus suaves y sensibles pezones por debajo de su camisa.

Su camisa fue removida y el sujeto trató de sacar sus...