glosario
Cuando estalló la crisis económica mundial mi primer pensamiento fue “no todas las consecuencias de esta crisis serán negativas”. Ya sin entrar en el plano moral yético la medicina comienza a darme la razón. El crecimiento económico se asocia generalmente con el incremento de la esperanza de vida, sin embargo esta realidad tan solo es cierta en los países muypobres en los que cualquier mejora ayuda sin duda a mejorar y alargar algunos meses o años la vida de las personas.
Para los que vivimos en países ricos, la cosa cambia radicalmente o al menos esoafirma un informe riguroso de la Canadian Medical Association, que declara que no hay nada como “una buena recesión” para ponerse en forma. Los autores del informe han analizado los datos de cientos deinformes realizados durante el pasado siglo que corroboran esta tesis .
Así durante estos crudos y aciagos periodos los habitantes de los países desarrollados se ajustan el cinturón de verdad. Bebenmenos, fuman menos, dejan de comer cosas innecesarias. También estos ciudadanos está demostrado que salen menos, lo que se traduce en un descenso en los viajes en automóvil y con ello de los accidentesde tráfico.
Asimismo disminuye drásticamente la tasa de mortalidad por cáncer de pulmón, enfermedades hepáticas e infartos y nos hace recobrar un cierto sentido de la austeridad, de la moderación y deotras llamadas virtudes – hoy olvidadas – que contribuyeron a crear décadas más tarde el estado del bienestar en todos sus campos y que hoy conocemos, épocas en las que habiendo muchos menos bienesde consumo había sin embargo una tasa de ilusión mucho mayor tanto en los adultos como en los jóvenes. La primacía del ser sobre el tener.
La recesión contemplada desde el punto de vista clínico esbuena para la salud sobre todo teniendo en cuenta los excesos a los que la sociedad de consumo y la opulencia habían llegado.
Recordemos las virtudes que Gregorio Marañón señalaba para cada edad de...
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