Guia de estadisticas resulta

Política pública y acción comunicativa: el déficit enunciativo en los procesos de diálogo

Teresa Matus S. 1
1 Dra en Sociología IUPERJ Rio de Janeiro. Investigadora y Evaluadora Conicyt. Miembro de la Sociedad chilena de Políticas Públicas. Directora del Centro de Estudios de emprendimientos solidarios CEES-UC. Profesora de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad Católica.Investigadora responsable Fondef DO7I1143. Sobre la construcción de un modelo de gestión de calidad para programas sociales 2009/2012.

La premisa central del trabajo sostiene que las políticas públicas han prescindido de las teorías generales de la sociedad y, por tanto, se encuentran en una paradoja: querer aportar a la agenda social, sin sistemas adecuados para pensar e interpretar lasociedad en que vivimos. Esa suerte de olvido sociológico, esa tarea pendiente de las políticas públicas será la clave a trabajar. Ella se puede exponer desde Habermas como un déficit de enunciación en los procesos de diálogo por las siguientes razones:

* el diálogo es el resultado de un proceso y no el inicio de una mesa de conversación,
* el diálogo sólo se consigue desnaturalizando laacción estratégica, develando el pensamiento identitario y los intereses fácticos,
* el diálogo requiere aumentar los niveles de reflexividad y generar una política del reconocimiento como base de las formas de entendimiento
* el diálogo involucra un giro procedimental hacia una acción comunicativa
* la noción de diálogo en Habermas puede iluminar especialmente los contextos de extremanegatividad por su potencialidad crítica.

Por tanto, estas serán las dimensiones a trabajar en la exposición:

En primer lugar un reconocimiento: existe un salto cualitativo en políticas públicas al colocar en los últimos 20 años los procesos de diálogo al interior de los procedimientos pertinentes para llevar a cabo una agenda pública. Como diría Savater, no podemos olvidar el recuerdo de lopeor. Esto es, los tiempos en que los mecanismos públicos eran ajenos al diálogo y se legislaba mediante decretos leyes, cuando la noción de seguridad del Estado se anteponía a la seguridad de los ciudadanos y como ya lo sostenía Adorno, no era el orden el que llegaba sino el terror.

Desde entonces hasta ahora existe un gigantesco salto cualitativo, donde prolifera el intercambio de opinionesy el debate público. Los mecanismos del diálogo son reiteradamente invocados, se convocan mesas de diálogo, se llama a la participación ciudadana, se la coloca incluso como una línea de gestión, la gestión participativa, se proponen soluciones mediante el diálogo. Esto incluso genera nuevos estándares donde se aprecia como políticamente incorrecto mandar a callar, o censurar directamente.

Esprecisamente en virtud de estos avances que se requiere profundizar, ajustar, colocar de nuevo el objeto contra su concepto, para poder iluminar las paradojas existentes en torno al diálogo: cuatro escenas públicas pueden graficarlas mejor

* El diálogo como estrategia: la invocación al diálogo en el denominado “conflicto mapuche se asemeja a una renovada estrategia de “pacificación” Se pidedejar fuera la violencia para entenderse y con ello se reitera la imposibilidad de comprensión de una historia violenta, reiterada en contextos de extrema negatividad. Pobreza máxima, criminalización progresiva de las demandas reduciéndolas a un asunto policial, fuerza desproporcionada, allanamientos de viviendas. Un proceso de diálogo donde los muertos son mapuches: Alex Lemún, Matías Catrileo,Jaime Mendoza. Incluso una sombra pavorosa de semejanza que se cuela de otro tiempo: algo andarían haciendo que terminaron muertos.
* Un diálogo de sordos: el diálogo parlamentario se hace al precio de la persistencia en un sistema binominal que excluye actores relevantes. Por otra parte a cualquiera de nosotros que asista a alguna de sus sesiones podrá apreciar que en realidad, cuando un...