Guion Teatral

La calle de la Quemada


(En una plaza de la ciudad de México. Se escucha a gente transitando, hablando, y por demás, en su rutina diaria, es 1650, por lo que la plaza es bastante sencilla. Se escucha ruido de murmullos, risas, y ruido de carretas.
Al poco tiempo la vista se enfoca en dos mujeres.).
MADRE
(Con aire de autoridad, camina al lado de su hija)
¡Por fin hemos llegado!
BEATRIZ(Caminando junto con su madre, sorprendida de la ciudad)
¡No esperaba que fueran tan hermosas las ciudades de la Nueva España, en verdad que son diferentes de la Villa!
MADRE
¿Qué era lo que esperabas? Esta ciudad es donde tu padre decidió nuestro domicilio, aunque el llegara dentro de algunos meses, pues tiene asuntos pendientes en España.

En la charla, llega a la plaza una carroza quetransporta a un joven apuesto, elegante y refinado.

MARTIN
(Baja de su carreta y observa las dos mujeres, se puede notar un brillo en sus ojos, se encamina así a ellas).
¡Muy buena tarde tengan ustedes bellas damas, veo que ustedes no son de por aquí!; puedo adivinar que vienen de la madre España, ¿no es así?

MADRE
En efecto, hemos venido desde España, pero considero que este tipo deasuntos serian más convenientes de tratar con un conocido.

MARTIN
¡Oh! Perdone
(hace una reverencia)
Tienen ante ustedes al Marques de Piamonte y Franteschelo, conocido como DON MARTIN DE SCÓPOLI, hijo de Don Federico Scopoli de Vargas Llorosa y Doña Elizabeth del Bosque; si no es mucho pedir, ¿pudiera preguntar sus nombres ?

MADRE
(Sorprendida, muestra cierta confianza)
¡Que joven tangalante!, soy TERESA SUAREZ DE MALLORCA, y ella es mi hija BEATRIZ, nos hemos dispuesto a vivir en esta ciudad.

En la charla de MARTIN y DOÑA TERESA, BEATRIZ aprovecha a ayudar a un mendigo.

BEATRIZ
(Con una voz gentil, agachada para hablar con el hombre en cuestión)
Caballero ¿se encuentra bien?, por favor acepte estas piedras preciosas, aunque para mí no tienen un valor trascendental,estoy segura que usted podrá recibir buen dinero por ellas.

El mendigo ante aquel acto de bondad desinteresada derrama lágrimas mientras agradece a BEATRIZ, prometiendo no desperdiciar aquel generoso gesto de amabilidad, por lo que se marcha de la plaza.
MADRE
(Refunfuñando y moviendo los pies como si estuviese haciendo berrinche) ¡De verdad que me sorprende esa niña!, esa gente sucia no mereceni acercarse a nosotros, ¡en verdad no debería haber ninguna de esas gentuzas en esta ciudad!

MARTIN
Aun así, no puedo dejar de pensar que ese acto de humanismo fue en verdad reconfortante.

MADRE
Yo puedo pensar así de otras personas, pero nosotros debemos mantener nuestro prestigio, y no ayudar a o acercarnos a esa gente, que pasaría si fuéramos criticados por la aristocracia; no podríaresistir las burlas y calumnias.
En verdad no veo la hora para que se case y siente cabeza con algún noble, de una familia renombrada y distinguida.
MARTIN
Por su belleza, su porte y su forma de ser tan delicada y apacible, no dudo que tenga algún pretendiente.
MADRE
Eso espero, no tiene realmente demasiado que empezamos a presentarla a la sociedad, por lo que no muchos caballeros han tenidola suerte de conocerla.
MARTIN
(Con una sonrisa en el rostro)
Si me lo permite, me gustaría escoltarlas a su residencia, por lo que veo su carroza tiene una demora considerable.
MADRE
¡Maravilloso!, en verdad que es un molestia aguardar a nuestro chofer, permítame llamar a mi hija por favor.
¡BEATRIZ, ven enseguida!, el gentil caballero nos brindara el transporte a nuestro hogar.
BEATRIZ(Se le ve sorprendida, pero asiente y se dirige con su madre)

El grupo sube a la carroza de MARTIN, y se disponen a ir a la residencia de la familia Espinosa.
(En una calle, frente a una residencia. Los edificios tiene una estructura colonial clásica. La calle es transitada por pocas personas, por lo que no hay tanto ruido, solo personas de la localidad.)


Al llegar al portón ambas mujeres...