GUION

Era un domingo por la mañana muy normal. Raúl Eduardo Lázaro de la Oca tenía 16 años de edad era un joven como cualquier otro muy rebelde, déspota y grosero pero a pesarde eso tenía algo especial que le agradaba a Dios.
Un día antes había salido de fiesta con sus amigos y se había puesto ebrio, algo normal de él, su mamá no se daba cuentade las circunstancias de como llegaba su hijo porque estaba tan dormida que no se fijaba, al día siguiente era domingo y tenía que ir a la iglesia con su mamá pero como sumamá hace un mes se había cambiado de iglesia él muy frescamente ponía de pretexto que si no iban a la otra iglesia no iba a ir a otra, así estuvo todo el tiempo desde que secambiaron de iglesia pero ese domingo antes de que su mamá fuera a la iglesia ya se había peleado con él y le había dicho que la salvación era individual y que ella ya no leiba a decir nada.
Ese domingo había algo de especial, su tía llegaría de un encuentro con Dios, el recibimiento de su tía seria el domingo en la noche, pero como el odiabademasiado a su tía que ni por la cabeza se le paso que iría a una cosa así de todos modos su mamá le dijo pero el negó y dijo:
-no iré a ningún lado es mi última palabra.Entonces su mamá de ver que el éxito no fue obtenido se fue con sus otras tías, él sentía que era feliz y nada le faltaba, cuando estaba con personas mostraba felicidad yalegría, pero cuando él se encerraba en su cuarto soló sin nadie que lo interrumpiera se ponía a pensar muchas cosas y sentía un gran vació en su corazón, él queríacontrolar demasiadas cosas de él que lo llevaban a la perdición pero con su propia carne no podían, sentía mucho odio y rencor hacia muchas personas, sentía dolor y amargura