Guión Mary Poppins

(TELÓN CERRADO. LOGO PROYECTADO SOBRE TELÓN)
(MEDLEY)
(ENTRADA DE BERT CON ACOMPAÑAMIENTO DE LA ORQUESTA)
BERT: Bien, señoras y caballeros, ahora les haré poemas cómicos inventados para la ocasión y al minuto, ante sus propios ojos. Muy bien, allá van: (CANTANDO) “Vengan, acérquense alrededor”. Les confieso complaciente que son ustedes la gente más amable y sonriente, que jamás imaginó mimente. Y quien diga lo contrario, miente. ¿Qué les ha parecido, eh? (SIGUE TOCANDO Y CANTANDO). “Hola, ¿qué tal? Ahí va para usted”. Esto te va a encantar, aunque seas pequeño, pero ojo, creo que allí está tu seño (SIGUE TOCANDO Y CANTANDO). “Hola señor… Viento de este y niebla gris anuncian que viene lo que ha de venir. No me imagino qué irá a suceder. Más lo que ahora pase, ya pasó otra vez.”(SIGUE TOCANDO)
Tengo entendido que andan ustedes buscando la calle del Cerezo número 17. Pues andando, vengan conmigo, está un poco más abajo, pero de momento echen un vistazo. Aquí vive la señora Boom. Su marido sirvió en la marina e hizo convertir un barco de guerra en una casa. Vive con su hermana y le gusta estar siempre preparada para entrar en combate.
BOOM: ¿Está listo el cañón?
SR.BITÁCORA: Listo y cargado, señora.
BOOM: Faltan tres minutos y seis segundos.
SR. BITÁCORA: A la orden, señora.
BERT: El almirante mantiene esto de la puntualidad por narices. El mundo se rige por el horario de Greenwich, y Greenwich, según dicen, por el almirante Boom. ¡A la orden, almirante!
BOOM: Buenas tardes, marinero. ¿Puedo saber qué rumbo lleva?
BERT: Voy a la calle del Cerezo, número 17.BOOM: Apúntelo en el cuaderno de Bitácora.
SR. BITÁCORA: A la orden, señora.
BOOM: Le daré un consejo, marinero: existen señales de tormenta sobre el número 17. Se está formando una borrasca en ese sector.
BERT: Gracias, señora. Navegaré con cuidado. (SIGUE CAMINANDO Y SE ABRE EL TELÓN. ESCENARIO CASA) Ya estamos, calle del Cerezo, número 17. Residencia del honorable George Banks (SE MARCHA PORLAS ESCALERAS A LA IZQUIERDA DEL ESCENARIO. LAS ACTRICES PERMANECEN QUIETAS HASTA QUE BERT SE HAYA MARCHADO).
BRILL: Que se vaya y no vuelva nunca.
ELLEN: ¿Nunca más?
BRILL: Eso es lo que le he dicho, que no vuelva nunca más. Nunca me ha gustado esa mujer.
ELLEN: ¿Quién se va a encargar de cuidar a los niños si la niñera se marcha? Yo, ¿verdad?
BRILL: No puedo soportar esos aires de granseñora, y esa cara de perro a la que solo le falta ladrar.
KATIE: No se preocupe, señora Brill. No me quedaría en esta casa ni un minuto más, aunque me ofrecieran todas las riquezas del mundo.
ELLEN: Un momento, Katie. No se vaya (IMPIDIENDO QUE SE MARCHE).
KATIE: Quítese del medio, sirvienta.
ELLEN: ¿Qué dirá el señor cuando se entere de que los niños han desaparecido.
KATIE: Eso ya no meimporta. A mí esos monstruos no se me volverán a escapar, porque me voy ahora mismo.
ELLEN: Pero tienen que estar en algún sitio. ¿Miró usted bien en el parque? Usted ya conoce a Jane y Michael.
KATIE: Me tiene sin cuidado. En esta casa he terminado para siempre.
BRILL: Que la vaya muy bien. Y mucho cuidado al salir, no tropiece con el escalón.
ELLEN: Oh, no, por favor, Katie, no se vaya. (OYECANTAR FUERA A WINIFRED “hoy las cadenas hay que romper”) Es la señora Banks.
WINIFRED: (ENTRA A CASA CANTANDO) “Y nuestras dignas sucesoras cantarán al ser mayores. Por fin, vota la mujer”. ¡Ellen, querida, qué tarde tan gloriosa, y qué meeting! La señora Bitbur se encaramó al coche del concejal de urbanismo y le dijo unas cuantas verdades…
KATIE: Señora Banks, yo también quería decirle…
WINIFRED:Se la llevaron al calabozo, pero se fue repartiendo propaganda mientras huía de los antidisturbios…
KATIE: Me alegro mucho, yo siempre he intentado sacrificarme, pero…
WINIFRED: Se lo agradezco mucho, querida. Ya sabía yo que usted era una de las nuestras.
Fiero soldado con faldas soy, en pos del derecho al voto voy.
Que adoro al hombre, no hay ni qué decir. Pero todos juntos son...