Género
Páginas: 7 (1550 palabras)
Publicado: 17 de febrero de 2015
RELATORÍA
Capítulo 9: “Representaciones y prácticas acerca de la salud y la enfermedad en un grupo de obreras”, del texto “Voces disidentes. Debates contemporáneos en los estudios de género en México”.
Katty Milena Echavarría Durán
Eliana Damaris Montoya Vera
Jazmín Astrid Vásquez Vásquez
LÍNEA DE PROFUNDIZACIÓN II
Gloria Hernández
Gustavo López
Claudia LópezUNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA
FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANAS
DEPARTAMENTO DE TRABAJO SOCIAL
MEDELLÍN
2008
El presente trabajo es una relatoría realizada al capítulo 9: “Representaciones y prácticas acerca de la salud y la enfermedad en un grupo de obreras”, de la autora Josefina Ramírez Velásquez, del texto “Voces disidentes. Debates contemporáneos en los estudios de género enMéxico”.
El tema principal del capítulo gira en torno al estudio de la salud de la mujer obrera, tratando de problematizarlo a partir de la búsqueda del significado social de la enfermedad. Es importante señalar que la autora de este apartado centra su discurso desde la antropología médica1, y su interés por la salud de la mujer obrera industrial se da porque existe muy poca conceptualización alrespecto, y porque la realidad muestra a diario “la explotación encubierta y guardada, así como el trato discriminatorio y hostil de que son presa las obreras de muchos centros fabriles, y que están incidiendo en su estado de salud”. (P 278)
El ensayo esbozado en este capítulo, enseña la ruta epistemológica y metodológica que llevó a cabo la autora para la realización de su investigación, lacual fue abordada desde la perspectiva de la construcción sociocultural de las obreras sobre el padecer, de ahí que nos parezca importante diferenciar, que “el padecimiento alude a la experiencia y percepción que construye el que lo sufre, mientras la enfermedad refiere a categorizaciones elaboradas desde la profesión médica. Ambos constituyen uno de los principales ejes de construcción designificados, simbolizaciones y representaciones colectivas que tienen una historicidad propia y que va a expresarse de manera diferencial tanto en las distintas etapas de la vida como entre los distintos estratos, sectores y conjuntos sociales.” (P 285)
La antropóloga Josefina Ramírez hace énfasis en su ensayo sobre la ruta metodológica, ya que según ella, buscó la aplicación de una etnografía quetrascendiera la observación participante para dar paso a un espacio de creación desde el punto de vista del actor; es decir, volver al sujeto para describir y analizar, desde su propia voz, explicaciones y acciones.
El trabajo etnográfico descrito por la autora, estuvo guiado por distintas visitas al proceso productivo de una empresa, donde tuvo la posibilidad de interactuar durante seis mesestanto con el médico como con las obreras. El diario de campo fue un instrumento de registro esencial para la construcción de datos y también aplicó una encuesta. La investigadora contempló dos fases para la construcción del patrón de análisis, la primera se refiere al tratamiento de información cualitativa, y la segunda, al análisis de los datos cuantitativos captados por la encuesta.Además, trabajó con la elaboración de fichas que denominó de caracterización, las cuales, le permitieron un proceso de interpretación de las representaciones y prácticas de las actoras en cuestión.
El trabajo de campo implicó el encuentro con el “no dato”, por ejemplo, cuando se planteó por primera vez el proyecto de investigación al médico de la fábrica, este expuso las bondades de la empresa, elexcelente salario, las prestaciones y el buen estado de salud de las trabajadoras, discurso que según la antropóloga, muestra un claro interés por opacar las contradicciones reales que operan al interior de las empresas. Además, para él era claro que dentro de la empresa no existían enfermedades graves entre los trabajadores y trabajadoras, aunque según el doctor, el género femenino tiende a...
Capítulo 9: “Representaciones y prácticas acerca de la salud y la enfermedad en un grupo de obreras”, del texto “Voces disidentes. Debates contemporáneos en los estudios de género en México”.
Katty Milena Echavarría Durán
Eliana Damaris Montoya Vera
Jazmín Astrid Vásquez Vásquez
LÍNEA DE PROFUNDIZACIÓN II
Gloria Hernández
Gustavo López
Claudia LópezUNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA
FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANAS
DEPARTAMENTO DE TRABAJO SOCIAL
MEDELLÍN
2008
El presente trabajo es una relatoría realizada al capítulo 9: “Representaciones y prácticas acerca de la salud y la enfermedad en un grupo de obreras”, de la autora Josefina Ramírez Velásquez, del texto “Voces disidentes. Debates contemporáneos en los estudios de género enMéxico”.
El tema principal del capítulo gira en torno al estudio de la salud de la mujer obrera, tratando de problematizarlo a partir de la búsqueda del significado social de la enfermedad. Es importante señalar que la autora de este apartado centra su discurso desde la antropología médica1, y su interés por la salud de la mujer obrera industrial se da porque existe muy poca conceptualización alrespecto, y porque la realidad muestra a diario “la explotación encubierta y guardada, así como el trato discriminatorio y hostil de que son presa las obreras de muchos centros fabriles, y que están incidiendo en su estado de salud”. (P 278)
El ensayo esbozado en este capítulo, enseña la ruta epistemológica y metodológica que llevó a cabo la autora para la realización de su investigación, lacual fue abordada desde la perspectiva de la construcción sociocultural de las obreras sobre el padecer, de ahí que nos parezca importante diferenciar, que “el padecimiento alude a la experiencia y percepción que construye el que lo sufre, mientras la enfermedad refiere a categorizaciones elaboradas desde la profesión médica. Ambos constituyen uno de los principales ejes de construcción designificados, simbolizaciones y representaciones colectivas que tienen una historicidad propia y que va a expresarse de manera diferencial tanto en las distintas etapas de la vida como entre los distintos estratos, sectores y conjuntos sociales.” (P 285)
La antropóloga Josefina Ramírez hace énfasis en su ensayo sobre la ruta metodológica, ya que según ella, buscó la aplicación de una etnografía quetrascendiera la observación participante para dar paso a un espacio de creación desde el punto de vista del actor; es decir, volver al sujeto para describir y analizar, desde su propia voz, explicaciones y acciones.
El trabajo etnográfico descrito por la autora, estuvo guiado por distintas visitas al proceso productivo de una empresa, donde tuvo la posibilidad de interactuar durante seis mesestanto con el médico como con las obreras. El diario de campo fue un instrumento de registro esencial para la construcción de datos y también aplicó una encuesta. La investigadora contempló dos fases para la construcción del patrón de análisis, la primera se refiere al tratamiento de información cualitativa, y la segunda, al análisis de los datos cuantitativos captados por la encuesta.Además, trabajó con la elaboración de fichas que denominó de caracterización, las cuales, le permitieron un proceso de interpretación de las representaciones y prácticas de las actoras en cuestión.
El trabajo de campo implicó el encuentro con el “no dato”, por ejemplo, cuando se planteó por primera vez el proyecto de investigación al médico de la fábrica, este expuso las bondades de la empresa, elexcelente salario, las prestaciones y el buen estado de salud de las trabajadoras, discurso que según la antropóloga, muestra un claro interés por opacar las contradicciones reales que operan al interior de las empresas. Además, para él era claro que dentro de la empresa no existían enfermedades graves entre los trabajadores y trabajadoras, aunque según el doctor, el género femenino tiende a...
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