¿Hacia dónde vamos los periodistas?

¿Hacia dónde vamos los periodistas?
El periodismo es una de las profesiones más interesantes y dinámicas que hay sobre la faz de la Tierra. No sólo por todas las cualidades que se requieren para ser un buen periodista, sino por todo lo que ser un buen periodista implica. Las experiencias obtenidas de cada reportaje, el contacto con la gente y con sus historias, el poder llevar a cada lector unpedacito de planeta, una nueva perspectiva de mundo, son privilegios de esta bella, importante, y tan discutida labor.
Con el surgimiento de la Internet y de las tantas e innumerables herramientas tecnológicas que pone a disposición de casi todo el mundo, aparece la pregunta del millón: ¿y adónde van a quedar los periodistas? Porque, si ahora cualquiera con una cámara puede postear un vídeo yescribirle una reseña, o cualquiera puede tomar fotos y publicar lo que lo que piensa sobre determinada situación y hacerlo viral a través de las redes, entonces ¿para qué necesitamos periodistas?
Las nuevas generaciones de estudiantes de periodismo se enfrentan ante esta coyuntura. No es que los afecte solo a ellos, los trabajadores con más años de experiencia también se han visto en laobligación de encontrar un modo para adaptarse a las exigencias de esta nueva era digital. Sin embargo, los jóvenes son los que deben abrirse espacio para poder ingresar al mundo laboral, y para ello deben hacer uso pleno de sus capacidades de ingenio y creatividad.
No obstante, no sólo se trata del panorama oscuro anunciado para la labor periodística. Todavía hay quienes afirman que esta es la mejor épocapara ser periodista. Y tienen razón. Al fin y al cabo, la labor de los periodistas sigue siendo igual o más importante que en el pasado. Con toda la cantidad de información almacenada en “la nube”, fluyendo de un lado a otro en un vaivén indescifrable, es necesaria la intervención de personas con la formación, capacidad y herramientas necesarias para separar los datos útiles y provechosos de losinnecesarios y manipulados.
Por otra parte, tal vez, lo único que está cambiando es el modo de hacer periodismo. Y los cambios no tienen por qué ser sinónimos de catástrofe. Al contrario, los tiempos de crisis son necesarios, pues de ellos nacen las ideas innovadoras. Justamente ahora es el momento donde se abren más espacios y oportunidades para legitimar el valor del trabajo periodístico. Parareivindicar con más fuerza su importancia dentro de sistemas democráticos, para seguir otorgándole una voz a aquellos que por unas u otras razones no son escuchados, para visibilizar esas historias que nadie se atreve a contar, pero el mundo necesita conocer; para, a través de esta maravillosa labor, humanizar más a la humanidad.
El ejercicio del periodismo es, quizá, uno de los más complejosque existe. Complejos en el sentido de que un periodista sabe que muchas veces, su trabajo es la única conexión entre las personas y el resto del mundo. En esos casos, tiene un manejo casi total de la realidad, de lo que la realidad significa para esa persona que lo lee, lo ve o lo escucha. Por ello, el periodista cuenta con un gran sentido de responsabilidad y de deber hacia su público o audiencia.Él sabe la importancia de mantener su nombre asociado al concepto de credibilidad y para eso necesita ser transparente, verificar la información de cual hace uso, tener una formación ética sólida. En grandes compañías o empresas de medios de comunicación, esta obligación de transparencia exigida al periodista entra en conflicto, en tanto la información se vea subordinada a intereses financieros,políticos y económicos. Su labor se ve frente a la disyuntiva de seguir sus instintos y sus valores y formación para el ejercicio del periodismo o responder a lo que le exige la compañía para la cual trabaja. Según la situación en la que se encuentre, no tendrá muchas opciones.
Pero… ¿vendrán tiempos mejores?
Si lo que entra en una verdadera crisis no es el periodismo en sí, sino el modelo de...