Haciendo la diferencia

“HACIENDO LA DIFERENCIA”

En todas las personas, en lo más profundo de nuestros corazones existe el deseo de aportar algo de valor a la vida.
La gente en todas partes anda en busca de la llave mágica que les abra las puertas a una vida más significativa. No en balde los psicólogos y los psiquiatras en general, concuerdan en que una de las necesidades psicológicas básicas de todo ser humano eshacer una singular aportación a la vida.
Cómo nos afecta esto:
El no poder contribuir hace que muchas personas sientan que su vida ya no tiene sentido. Si, el contribuir es una necesidad psicológica básica. Todos necesitamos sentir que aportamos algo digno de mérito. No satisfacer esta necesidad es tan perjudicial en la edad adulta como en la infancia. Tal descuido muchas veces se refleja en lasalud mental y física del individuo. Para ser feliz, para tener un equilibrio dinámico en medio de la tensión y el esfuerzo, para estar en óptimas condiciones, necesitamos sentir que día a día estamos haciendo algo de valor. Es importante para nuestra personalidad, para nuestra actitud mental y para nuestra salud física.
El aburrimiento es algo lamentable, porque corroe la sensación de bienestar.Este es un estado enfermizo. El aburrimiento continuo deforma nuestra personalidad. Nos volvemos agrios y sosos. Para extraer el máximo de nosotros necesitamos incentivos. Por eso lo que hacemos debe ser significativo.
Sí, la vida sin propósito es triste. Pero cuando tenemos un objetivo en la vida, el mundo ofrece una perspectiva diferente. Y cuando lo que hacemos se vuelve más significativo,nos proporciona verdadero dinamismo. Este es el material de que están hechos los sueños, y añade sabor e interés a la vida.
La vida puede ser significativa:
Todos hemos escuchado la frase: “la vida es bella”. Pero la vida no es bella si carece de significado. Esta es la diferencia entre el vivir significativamente y el vivir vacío y ordinario.
El mundo está lleno de personas que se esfuerzan enhacer algo “grande”. Pero después que logran el objetivo, ¿qué? Poco han aportado a la vida. ¿Por qué? Porque sus objetivos tenían poco significado. Los propósitos eran demasiado débiles.
De más está decir que muchos son los aportes importantes que podemos hacer en la vida. Se necesitan urgentemente recursos humanos en todas las esferas de la vida. El mundo está a la espera de hombres y mujeresque aporten algo significativo.
Escapar del trabajo rutinario no es la solución. Evadir responsabilidades no hace más feliz a nadie. Generalmente el problema básico no está en el trabajo ni en el clima, sino en la persona. Vayan donde vayan sus problemas van con ella. La solución, pues, es ajustarse a la realidad. Un viejo proverbio latino dice que “nadie puede dar lo que no tiene” (Nil dat quodnon habet). Sí, sólo podemos dar lo que tenemos. “Porque a todo aquel a quien se la haya dado mucho, mucho se le demandará” (Lucas 12:48) Dios no nos juzga por el mucho talento que tenemos, sino por la manera en que usemos los talentos que tenemos.
Todos no podemos ser luces fastuosas en el salón principal. Alguien tiene que alumbrar el fondo del pasillo. Pero las luces menores son tan necesariascomo las luces deslumbradoras. Es más, muchas veces son más necesarias.
Nunca es demasiado tarde.
Nunca es demasiado tarde para empezar a hacer algo de valor. A veces hay que ser decididos para salir de la rutina, pero siempre da satisfacción proseguir hacia un objetivo, no importa la edad.
La calidad del aporte que una persona puede ofrecen a la via no depende de su edad. Es cierto que lajuventud tiene vigor, pero la madurez tiene la ventaja de la experiencia. Las motivaciones son para quienes las aceptan. Nunca es demasiado tarde para realizar una tarea si Dios nos llama para realizarla.
Alentar a otros:
Las alegrías más grandes de la vida las recibimos a medida que nos damos a los demás. Cada día ofrece una oportunidad de hacer esto, especialmente mediante el estímulo de los...