Hambre De Alguien Que Me Escuche

Hambre de ALGUIEN que me ESCUCHE.
Cuando desarrollamos la habilidad de OÍR más y HABLAR menos, hemos descubierto el secreto para iniciar y mantener relaciones saludables.
Lic. Federico Soto.

* Preguntas que TODOS nos hemos realizado.
En mi increíble y desafiante tarea como consejero matrimonial y familiar, comúnmente escucho personas angustiadas que me hacen, más o menos, lassiguientes preguntas:
¿Por qué cuando quiero conversar con mi esposo(a), siempre terminamos discutiendo? ¿Por qué tengo miedo iniciar una nueva conversación con él (ella)? ¿Por qué cuando quiero conversar con mi hijo para corregirle, terminamos alzando la voz y tengo que recurrir a una amenaza o algún castigo? ¿Por qué a mis Padres nunca parecen importarles lo que pasa en mi vida y solo quierencorregirme con gritos o amenazas? Y la que yo llamaría <la más triste y deprimente pregunta>: ¿Por qué cada día creo menos posible, que podamos tener una conversación amable y constructiva?
Como desearía que usted no se identifique con estas u otras preguntas similares, pero la realidad es diferente. Miles de familias están más lejos de desear tener momentos de conversación. El pasado lleno deconversaciones que terminaron en discusiones, amenazas o golpes, nos han orillado a huir de posibles conversaciones por temor. Aunque tenemos que admitir que, en lo más profundo de nuestro ser, este es el alimento que desea nuestra alma. Anhelamos profundamente conversaciones para abrir nuestro corazón, pero tememos fracasar nuevamente en el intento, y terminar más lejos de nuestra familia que alinicio. Esto último nos ha llevado a vivir en familia, pero lejos unos de los otros. ¡Esto no tiene que ser así!
TODOS deseamos descubrir los secretos que nos ayuden a iniciar y mantener relaciones saludables y significativas.
* Qué debemos hacer y quién podrá ayudarnos
Hace unos días mientras hacía mi lectura devocional, me encontré con el maravilloso principio que nos ayudará a tenersaludables vías de comunicación. Santiago nos da este consejo: “Todo ser humano (hombre, mujer, esposo, esposa, papá, mamá, hijo, amigo, etc.) sea pronto para OIR, tardo para HABLAR, tardo para AIRARSE”.
Cuando leí estas palabras descubrí la razón principal del por qué la mayoría de las conversaciones en la pareja, la familia y en toda relación, terminan en discusiones acaloradas. Santiago nos da laclave: hablamos más de lo que escuchamos y por eso nunca nos entendemos y terminamos discutiendo, airados y cada día más lejos el uno del otro.
Cuando cada uno de nosotros busca hablar más de lo que escucha, ya está lanzando un mensaje: <Lo que yo digo es más importante e inteligente de lo que tú puedes decir>. Y este pelear porque sea valorado mi pensamiento desemboca en ira y discusiónacalorada. ¿Qué tontos hemos sido no le parece? Si desarrollamos la habilidad de (1) escuchar empáticamente, y (2) la disciplina de oír más de lo que hablamos en cada conversación, estaremos más cerca de la comprensión y más lejos de la discusión. ¡Así de simple y poderoso!
Desafortunadamente, por nuestra falta de disposición para escuchar, miles de hombres y mujeres están cayendo en las redesdel adulterio. Es tanta el hambre por ser escuchados, que cuando encuentran a un hombre o mujer que más o menos le oye, se entregan equivocadamente y se destruyen matrimonios y familias. Es tiempo de tomar el consejo de Santiago. Es tiempo de utilizar el sentido común. ¿Por qué cree que Dios nos dio dos oídos y una boca? ¿No nos estará diciendo Dios, a través de nuestra anatomía, que debemosescuchar el doble de lo que hablamos en toda conversación?
Bien dijo el apóstol Pablo que el hombre está sin excusa delante de Dios. Si tan solo nos miramos al espejo encontramos el principio para relaciones satisfactorias: Oye el doble de lo que hablas, así vivirás feliz en correctas y crecientes relaciones.
* Unos chistes con moraleja.
Chiste 1.-
Un renombrado guitarrista, al que le habían...