Harry potter

-Disculpa, no suelo ser una compradora compulsiva.-dije avergonzada cuando aquel ayudante del hotel cargo mis cosas hasta la habitación.
 

-No te preocupes.-contesto Lucas esbozando una sonrisa tímida. Tenía unos ojos muy bonitos.-Hace días me empecé a preguntar, si tal vez tu…

 

 

La parte que seguía ya la conocía, pero no sabía qué respuesta le daría, no queríaser creída ni nada por el estilo… Solamente que nunca había salido en serio con nadie y no sabía cómo actuar… El ruido de unas llaves me distrajo un poco y vi aquellos ojos grises tan diferentes a los de Lucas… No quería que Malfoy creyera que lo dicho en el bar iba a impedirme disfrutar de esos días. Antes que el chico lograra formular su pregunta, yo respondí:

 

 

-Me encantaría salir apasear contigo.

 

-¡Oh!-contesto alegremente.-Esta bien, esta noche en cuanto termine mi turno pasare por ti.

 

 

Se despidió besando mi mejilla con aquel acento tan romántico que me dejo por un momento en las nubes… No podía negar que era un chico muy simpático pero sabía bien que por el momento no quería nada y mucho menos con alguien que viviera tan lejos. 

 

 

-Y así es la ley-dijo una voz socarrona trayéndome a la realidad.-Los impuros con la servidumbre.

 

-¿Qué tal si empiezas a alejar tus narices de mis cosas, Malfoy?-dije sin alterarme, aunque por dentro tenía unas ganas de golpearlo como aquella vez.

 

-¿Piensas que te estoy persiguiendo Granger?-pregunto desinteresadamente.-Me alegro por ti muggle… Ojala que tu cita nose arruine.

 

 

Por suerte había pasado seis largos años en Hogwarts junto a Malfoy, como para no saber que algo se traía entre manos… Sabía muy bien que su último comentario era puro sarcasmo… Es por eso que espere que se metiera en su habitación y por mi parte decidí quedarme en el pasillo en aquel asiento, era la única forma de asegurarme que no saldría de allí paracausar daño.

 

 

Pov. Draco

 

 

La tonta de Granger pensó que con quedarse allí afuera yo no sería capaz de arruinar su cita… Me acerque a la cama y cambiando la voz llame a recepción.

 

 

-Servicio de habitación, ¿Qué se le ofrece?-dijo una voz del otro lado.

 

-Acabo de pasar por el pasillo del quinto piso.- empecé con mi gran actuación.-Unmuchacho del servicio se encontraba acosando a una muchachita, ¿Cómo puede ser esto posible?

 

¿Está usted seguro Señor?

 

-¿Me trata de mentiroso?-pregunte enfadado.-Soy una persona respetable y no andaría por ahí divulgando falsos testimonios.

 

-No Señor, claro que no, perdóneme.- empezó a ponerse nervioso.- ¿Podría darme el nombre de la Señorita?

 

-¿Acaso está loco? LaSeñorita estaba aterrada, me pidió que no dijera nada pero yo no podía dejar que esto pasara por alto.

 

-¡Usted tiene razón!-respondió mas convencido.-Ya mismo arreglaremos la situación con nuestro empleado.

 

-¡La única solución es despedirlo!-dije con tono más fuerte.-Si no veo a ese muchacho fuera del hotel en unas horas, me veré en la obligación de abandonar este lugar y escribiruna fuerte crítica en los diarios.

 

-Sí, Señor… Claro, en seguida despediremos a este chico.-contesto mas nervioso.- Disculpe las molestias ocasionadas y le pediría que se lo informe a la Señorita del caso.

 

 

Corte la llamada satisfecho por mi proeza… Le había arruinado la noche a esa Granger… Me recosté sobre la cama y cerré mis ojos… ¿Qué había hecho? Mesentía bien por la maldad que esto tenia pero ¿Por qué lo hacía realmente? ¿Sería posible que esa sangre impura me importara más de lo que yo pensaba? La idea de solo pensarlo me parecía muy riesgosa… Mi padre me mataría antes de que esos pensamientos siguieran por mi mente… ¿Cómo alejarlos entonces de mí?

Me saque la ropa y me coloque la bata para darme un baño… Aquella...